Son imprescindibles y sin ellos la fiesta no es la misma. De hecho, sin música no hay fiesta. Ayudan a animar el ambiente, ya de por sí predispuesto a pasarlo bien. Para José Antonio Gras estas son sus decimo primeras Hogueras. Toca la percusión con distintas agrupaciones musicales y asegura disfrutar mucho haciéndolo, aunque reconoce que también es un trabajo duro.

Se pasa el verano de fiesta en fiesta, aunque trabajando. Este joven de 26 años natural de Callosa de Segura es arquitecto de profesión y percusionista por amor a la música, mientras el trabajo no se afianza del todo. Reconoce que en las fiestas siempre suena lo mismo porque es lo que les gusta a los festeros. Y cuenta que los músicos tienen una fama de «golfos» que a veces no se corresponde con la realidad.

¿Qué melodía está harto de tocar y de repetir?

En Hogueras sin duda la que más tocamos es «A la llum de les fogueres». Se repite una y otra vez, es la que quieren los festeros y la que estos días corresponde. Luego tenemos otras ocho o nueve fijas que son charangas y pasodobles. Siempre nos piden las mismas. Y este verano aún se están tocando del verano pasado.

¿Qué es lo que peor lleva un músico de actuar durante las Hogueras?

Lo peor sin duda son los plantones y las esperas, como la de ahora mismo (acto de entrega de premios). Llevamos casi dos horas esperando, sin beber y sin almorzar, y con bastante calor. Y eso se multiplica porque tocamos las despertàs que suelen ser a las ocho de la mañana y a veces hasta las 11 de la mañana no volvemos a tocar. Empezamos en la Entrada de Bandas y terminaremos con la Cremà.

¿Y qué es lo que más le gusta de estas fiestas?

Lo que más me gusta es ir a visitar otras hogueras, hacer la ruta almorzando y bebiendo en los racós. Con Foguerer Carolinas como está más lejos del centro vamos en autobús.

¿Siempre toca con la misma comisión?

Llevo viniendo a las Hogueras desde 2004 y he estado con muchas, por ejemplo San Blas, San Antón Bajo y hoy estoy con Foguerer Carolinas con la que estamos muy a gusto. Toco con la agrupación Amigos de Albatera, y mañana por la mañana estoy en la Hoguera San Blas, trato de ir a tocar a todos los sitios donde me llaman.

¿Se vive bien como músico?

Pues saco un dinero extra, pero es duro porque hacemos muchas horas. Prefiero ganarme la vida como arquitecto, pero la música no me la dejo.

Y en cuestión de amores, ¿se liga mucho tocando?

Sí que se liga sí cuando vas de músico. Cuando la gente nos ve piensa directamente en fiesta. Yo tengo novia, pero los músicos cuando van tocando por la calle sí que ligan, porque la gente está de fiesta, hace calor, el verano, la gente también ha bebido un poco y hay mucha alegría en la calle.

De todos los músicos, ¿quiénes son los que tienen más éxito con chicas o chicos?

Pues los percusionistas porque vamos delante dando la marcha. Son los que más ligan. Hay un tópico y es que los músicos somos unos golfos, pero a veces nos golfean a nosotros, la gente va muy desfasada. Hay gente que se nos engancha del cuello y nos empieza a dar besos y abrazos.