El primer día del cierre al tráfico de las calles del centro, con la novedad de la eliminación de las tarjetas de acceso para residentes, provocó atascos en los accesos y en las calles del perímetro restringido a la circulación a primera hora de la mañana y después de la mascletà. Durante el resto de la jornada, hubo más densidad de tráfico de la habitual, pero menos retenciones que en años anteriores. Eso sí, con la excepción de la avenida del Doctor Rico, en la que, por primera vez, se cortaron los viales de circulación en sentido salida de la ciudad, a la altura del cruce con Adolfo Muñoz Alonso. Para sortear los atascos, hay diferentes opciones o trucos que permiten llegar al centro de la ciudad desde prácticamente cualquier punto de la provincia a bordo del bus, el tranvía o los cercanías. Dejar el coche en las localidades mejor conectadas con la capital, como San Vicente o El Campello, es una de las opciones.

Desde ayer, en la ciudad hay más de 300 calles cerradas al tráfico. Las avenidas del perímetro restringido, como Benito Pérez Galdós, Óscar Esplá o avenida de Salamanca, así como el acceso por el litoral -Juan Bautista Lafora y Conde de Vallellano- fueron las que más colapso registraron durante la primera hora del día y también tras el disparo de la mascletà. No obstante, el resto del día transcurrió con algunos atascos puntuales, pero con un tráfico más fluido que en ediciones anteriores. El ejemplo más significativo fue el la avenida de Benito Pérez Galdós.

Aunque se registraron retenciones intermitentes y mucha intensidad de tráfico, atravesar esta avenida en coche resultaba más fácil y rápido que otros años. Al desembocar en la plaza de España, el tráfico también era más fluido. Y es que muchos de los vehículos que quedaban atrapados en la plaza al no poder acceder al centro en ediciones anteriores, si pudieron entrar ayer sin que ninguno de los policías que vigilaba los accesos le requiriera autorización alguna. De hecho, la circulación de coches por la calle Calderón fue continua. Al llegar a Alfonso el Sabio muchos coches se decantaban por salir de la ciudad o proseguir hasta la Rambla, lo que les abocaba a callejear en busca de una salida. Ese es el principal problema que acarrea la eliminación de las restricciones. No obstante, el concejal de Tráfico y Transportes, Juan Seva, valoró ayer positivamente la supresión de las tarjetas de residentes porque, a su entender, es el principal motivo de la mayor fluidez del tráfico.

En la avenida del Doctor Rico no fue así. El cierre de uno de los sentidos de circulación -para instalar allí la hoguera de San Blas Alto- sorprendió a numerosos conductores que habían optado por este vial como alternativa para salir del centro y que se toparon con el atasco. Agentes de la Policía Local les desviaron por Adolfo Muñoz Alonso para sortear el tramo cortado y poder llegar hasta la Gran Vía o reincorporare más adelante a la avenida del Doctor Rico.

Estos días de Hogueras y en el caso de ser de Alicante, lo mejor es dejar el coche en el garaje o aparcado en una calle que no esté cortada al tráfico y desplazarse a pie. Para cubrir largas distancias dentro de la ciudad, el bus es la alternativa idónea. Hay que tener en cuenta que todas las líneas de autobuses urbanos funcionan con normalidad estos días -a excepción de los paros parciales de hoy entre las 13.30 horas y las 15.30 horas en los autobuses interurbanos (azules)-, pero las rutas evitan el centro y trasladan sus paradas de cabecera a vías situadas fuera de esta zona, como la Avenida Óscar Esplá, la Plaza de España y la Explanada.

Por la noche, el panorama es distinto en función de la zona de Alicante en la que se viva. Quien resida cerca de una parada de las líneas metropolitanas que se dirigen a la Playa de San Juan, El Campello, Sant Joan, Mutxamel, San Vicente y Villafranqueza estará de suerte, porque hay programados horarios nocturnos especiales en las líneas 21, 22, 23, 24 y 25. Durante todas las Hogueras estos servicios se prestarán de forma ininterrumpida a lo largo de la noche, con frecuencias que oscilan entre los 12-15 minutos de la línea a San Vicente (24N) y los 60 en la que se dirige a El Campello (21N).

Ambas poblaciones, además, cuentan con la ventaja de estar atendidas también por el TRAM, cuyas líneas funcionarán igualmente de manera ininterrumpida todas las noches, desde este viernes hasta la madrugada del día 25, con una frecuencia aproximada de entre 15 y 20 minutos. En San Vicente incluso tienen una opción más: los trenes de cercanías de Renfe. La compañía ferroviaria ha programado también servicios especiales para la mayoría de estas noches, que permitirán acceder al centro de Alicante hasta casi la medianoche y regresar a San Vicente como muy tarde hacia las 3 de la madrugada. El horario es mucho más restringido, pero con la ventaja de que el tiempo de viaje son sólo diez minutos.

A los residentes en toda la zona oeste y noroeste de Alicante, en cambio, por la noche apenas tendrán más opciones que ir a pie. En todo caso, en San Gabriel puede aprovecharse el apeadero de cercanías de una forma «urbana», ya que Renfe también ha programado servicios especiales para todas las Hogueras en la línea que se dirige a Elche. Hasta el próximo día 24 circularán, con una frecuencia aproximada de una hora, trenes especiales nocturnos entre la capital del Baix Vinalopó y Alicante, que permitirán disfrutar de la velada fogueril sin tener que preocuparse por el coche.

Una alternativa parecida tendrán los residentes en La Vila Joiosa y Benidorm, a través de la línea 1 del TRAM, donde circularán también varios trenes especiales durante las Hogueras, aunque no durante toda la noche. Es aconsejable mirar las correspondientes páginas web para ver qué servicios hay en cada línea y cuáles se ajustan más a los planes de cada uno: www.subus.es, www.tramalicante.com y www.renfe.com.

¿Y qué hacer si se reside en una población sin estos servicios especiales de transporte público nocturno? Una opción es dejar el coche en alguna de las localidades que sí cuentan con esta suerte, como San Vicente o El Campello, y seguir desde allí en tren o tranvía; también podría hacerse esto desde el apeadero alicantino de San Gabriel (donde, ojo, puede que cueste un poco más aparcar), o incluso desde Torrellano.

También puede probarse suerte e intentar aparcar por la zona comprendida entre la Gran Vía y el Bulevar del Pla, para tomar la línea 2 del tranvía en la parada homónima de esta última avenida. Y si no, algunas zonas donde a diario suele ser más sencillo aparcar, y donde tal vez no resulte muy difícil encontrar hueco estos días (aunque nada se puede asegurar al respecto, dada la masificación que se registra en la ciudad durante las Hogueras) son el Polígono de San Blas y la zona más al oeste de La Florida y Babel. Eso sí, desde allí, por la noche, la caminata hasta el centro está asegurada; aún así, es una alternativa mucho más aconsejable para desplazarse, y no sólo por el ejercicio que se hace, sino porque encontrar aparcamiento en el centro es una misión totalmente imposible.