Segunda RFEF

Más desafíos ¿imposibles? para el Hércules

No ha sido capaz de ganar cuatro partidos seguidos esta temporada, algo que conseguiría este domingo superando a la Peña Deportiva

Las dos únicas derrotas sufridas por los alicantinos en el Rico Pérez fueron en horario matinal

Samu Vázquez se pierde el partido y Roger Colomina y Ryan Nolan están al borde de la suspensión

Alberto Retuerta, en primer término, festeja junto al resto del equipo el Manresa, 0; Hércules, 1.

Alberto Retuerta, en primer término, festeja junto al resto del equipo el Manresa, 0; Hércules, 1. / Paco Largo / LOF

Pedro Rojas

Pedro Rojas

Pensamiento unánime en el vestuario del Hércules: «Si ganamos todo, somos campeones». Nadie lo cuestiona. Lo malo es que para conseguirlo, el equipo de Rubén Torrecilla tendrá que hacer algo que no ha logrado en toda la temporada: ganar cuatro partidos seguidos. A lo largo del curso, el conjunto alicantino ha sido capaz de enlazar tres victorias en tres ocasiones, pero se ha quedado ahí. A la cuarta no ha llegado nunca, algo que puede cambiar si es capaz de superar a la Peña Deportiva en su estadio este domingo. 

Si lo hace, además de derribar otra muralla esta temporada en la que ya acumula unos cuantos hitos conseguidos, estará en verdadera disposición de ganar la liga y hacer lo que no ha hecho desde 2010, saltar de categoría, en este caso a Primera RFEF.

El último entrenador que fue capaz de encadenar cuatro o más triunfos fue Sergio Mora. El exayudante de Pepe Bordalás llegó a las seis entre el final de la primera vuelta y el arranque de la segunda. Ni Lolo Escobar ni Ángel Rodríguez acertaron a ganar más de dos semanas consecutivas la temporada pasada, que acabó con el Hércules fuera de la promoción de ascenso y salvado de las garras de Tercera RFEF por el acierto de Carlos Abad, básicamente. 

Si el cuadro blanquiazul saca adelante todos sus encuentros hasta el final de la temporada regular habrá igualado al preparador madrileño y, a diferencia de lo que le ocurrió a él, no tendrá que jugarse el ascenso en una eliminatoria (este año son dos a doble partido) y dará el salto automático porque depende de sí mismo, algo que se antojaba casi imposible tras el varapalo en el Olímpic Camilo Cano de La Nucía hace un mes.

Primera misión cumplida

El bloque de Torrecilla tiene asegurada, como mínimo, su presencia en la postemporada, el mal menor para una entidad que lleva encadenando fracasos más o menos sonados desde 2011, cuando cerró sin brillantez su última presencia en la máxima categoría.

Sin embargo, existe otro inconveniente a tener en cuenta. El Hércules, que es el mejor visitante de la competición tras su victoria por la mínima en El Congost, el primer campo de césped artificial del que regresa con los tres puntos después de un viaje a Cataluña, tiene que afrontar dos de los tres envites que le faltan en Alicante. El dato se supone positiva, pero ofrece dudas por una razón sólida: las dos derrotas que han sufrido este curso los blanquiazules en su estadio mundialista se produjeron en horario matinal.

Perdió con el Formentera (0-1) con un gol en el tiempo extra y, cinco semanas después, repitió esperpento contra la Penya Independent encajando tres tantos. Todos antes de la hora de comer. El Hércules disputará las tres fechas que le restan en el turno matinal. La próxima por recibir a un equipo balear y las dos siguientes por haber sido fijadas por la RFEF para respetar el horario unificado en el desenlace del campeonato.

Torrecilla no oculta que saltar al campo a pleno sol no le satisface en absoluto. «Es el horario que menos me gusta, pero habrá que adaptarse...», dijo lacónico y resignado tras su victoria en El Congost. Abandonar la aspereza del fútbol de asfalto, a diferencia de lo que se pudiera pensar desde fuera, no es sencillo. Al Hércules le toca volver a enfrentarse a sus propios miedos y limitaciones para salir airoso... y bañarse en Luceros.

Roger Colomina arma el disparo desde fuera del área en Manresa en la victoria del Hércules.

Roger Colomina arma el disparo desde fuera del área en Manresa en la victoria del Hércules. / Paco Largo / LOF

Activada la alerta Colomina

El Hércules no podrá contar con Samu Vázquez este fin de semana, coincidiendo con la visita de la Peña Deportiva al Rico Pérez. Es una baja calculada, un mal menor «forzado» para tener disponible al lateral diestro en las dos citas finales, frente a Badalona y Lleida, que están llamadas a decidir el campeonato. El todavía jugador del Albacete llegó a las cinco amarillas después de muchas semanas guardándose de ser amonestado. La visita de los ibicencos, en zona de descenso, a los que se goleó en Santa Eulalia (1-5) hace pensar que es buen momento para prescindir de un titular sin sustituto natural en una plantilla con dos fichas profesionales sin cubrir.

Al borde de la suspensión siguen una jornada más Ryan Nolan y otro hombre que preocupa más, Roger Colomina, que está a un paso de cumplir su segundo ciclo de amonestaciones después de acumular 9 cartulinas amarillas. El centrocampista de Sabadell, fundamental en el entramado fundacional del juego de Torrecilla, titular siempre que ha estado disponible se perderá alguna de las citas que restan si es castigado con una tarjeta en un momento en el que Miguel Marí ha empezado a quedarse fuera de las listas de convocados por decisión técnica.

Colomina, a pesar de estar lejos aún de su media de goles, está siendo trascendente en la vuelta al origen de los alicantinos, empleando la misma estructura y los mismos perfiles que le dieron al cuadro blanquiazul el campeonato de invierno. La alerta ‘Colo’ vuelve a estar activada.