El Hércules se encuentra en una situación límite cuando todavía no ha acabado enero. Cada año llegan antes las decepciones, las prisas y las inseguridades por el Rico Pérez. El recuerdo del fracaso sonoro de la pasada temporada está aún muy reciente y por eso el director deportivo Javier Portillo alzó ayer la voz con el objetivo de que los jugadores reaccionen de inmediato. El domingo (17.00) visita Alicante el Cornellà, que ahora marca la zona de promoción y tiene cinco puntos más que los blanquiazules. «Es una final», reconoce Portillo.

Siguiendo la tradición de cursos pasados, la cuesta de enero está siendo especialmente dura y el Hércules desperdició el domingo, ante el Sabadell (1-1), la oportunidad de enderezar el rumbo. Los blanquiazules jugaron en superioridad numérica desde el minuto 43 y se adelantaron en el marcador gracias a José Fran. El cuadro catalán no se acercó con peligro al área de Falcón hasta que un disparo de Migue desde 40 metros sorprendió inexplicablemente al portero gaditano. El Hércules dispuso de una ocasión clara para volver a marcar, a centro de Óscar Díaz, pero Carlos Fernández envió al balón al larguero en posición inmejorable para desesperación del técnico Claudio Barragán.

Portillo no centró ayer sus críticas en ningún error en concreto, pero sí advirtió: «Con tantos regalos no vamos a ningún lado, hay que reaccionar ya».

El director deportivo admitió que el duelo ante el rival directo Cornellà es trascendental y espera que los futbolistas den un paso al frente. «Se acabaron las excusas, ya hemos dado demasiado margen a algunos rivales y tenemos que empezar a ganar. Sigo confiando en la plantilla pero hay que subir el nivel, estar más concentrados y ser agresivos», insistió.

Portillo lamentó las oportunidades perdidas a lo largo de toda la temporada, especialmente en el regreso a la competición tras las vacaciones de Navidad. El Hércules se dejó dos puntos en Olot (1-1) en los minutos finales y perdió otro ante el Alcoyano (1-2) con el gol de Eldin en la última acción del derbi. El nuevo varapalo sufrido ante el Sabadell deja al cuadro de Barragán contra las cuerdas y obligado a firmar una segunda vuelta de sobresaliente si quiere pelear por la promoción. «El partido contra el Alcoyano fue el único en el que no competimos bien, en el resto sí lo hicimos y tuvimos la victoria en la mano, pero no basta con hacer 85 minutos buenos, hay que mantener la concentración y la intensidad hasta el final», agregó Portillo.

El director deportivo afirmó que «sigue trabajando» para intentar reforzar con un atacante más la plantilla en el mercado de enero, pero también defiende el trabajo de sus «9» Óscar Díaz y Carlos Fernández: «Está claro que tienen que apretar y rendir, cuatro goles cada uno es una cifra baja para un equipo como el Hércules, pero también creo que sus compañeros tienen que ayudarles, jugar más cerca de ellos y buscarles».

Hasta el momento, Portillo ha firmado dos incorporaciones invernales: el extremo José Fran y el mediocentro alicantino Paco Candela. El primero debutó en Olot, dio una asistencia de gol (a Juli) contra el Alcoyano y marcó en Sabadell, mientras que el segundo fue presentado ayer y debutará el domingo en la final ante el Cornellà: «Tiene 25 años pero es un jugador muy contrastado, ascendió a Segunda y Primera con el Leganés y en el Fuenlabrada lo ha jugado todo esta primera vuelta. Su perfil es diferente al de Checa (ahora en el Mérida), es alicantino y nos va a ayudar mucho», concluyó.