Impulsado por el cambio de timón que ha provocado con su llegada Claudio Barragán, el Hércules cuenta las horas para enfrentarse el domingo en el Rico Pérez (12.00) al Atlético Baleares, el tercero que dispute el club en apenas siete días. No obstante, lejos de escudarse en el apretado calendario, el técnico blanquiazul ensalzó las ganas de sus jugadores de volver a competir: "Cuando los resultados son favorables, el cansancio desaparece mucho antes. Todos tienen unas ganas locas de jugar".

Claudio reiteró que ésta es una semana "de recuperación, más que de trabajo" y que el trabajo está siendo mucho más analítico. "Llevamos poco tiempo y estamos asimilando lo que queremos, empezamos a ser un equipo reconocible y eso es lo más importante", señaló un técnico valenciano que confío en continuar la estela de la buena imagen ofrecida en Son Moix el pasado miércoles. "Lo de Mallorca es una buena señal para que el equipo coja fuerzas y crea más, si seguimos en esta línea el equipo estará al final donde le corresponde", aseguró.

El entrenador blanquiazul confesó que tiene "ganas" de ganar y hacerlo bien: "Es siempre nuestra idea, sumar de tres, hacer un buen juego y que la gente se vaya feliz a casa, pero enfrente hay un rival que se juega lo mismo, y a veces no nos damos cuenta de esto".

Los 300 de Peña

Claudio valoró el hito de los 300 partidos con el club que cumplirá el capitán Paco Peña ante el Atlético Baleares: "Esos números son espectaculares, su profesionalidad es un ejemplo para los jóvenes". Además, el técnico contó una anécdota que vivió en sus carnes y que repitió con Peña hace unas semanas. "Cuando yo era un jugador ya veterano, Tolo Plaza me dijo que no iba a mirar mi carnet de identidad y que sólo se fijaría en mi rendimiento. Y eso mismo le dije yo a Peña cuando llegué al Hércules", expresó.