Chechu Flores, uno de los capitanes del Hércules, calificó ayer como «duro» el despido de Gustavo Siviero y aseguró que es «triste» que el club haya tenido que cambiar de entrenador para que los jugadores reaccionen. «Para mí fue duro el despido de Siviero porque es un entrenador espectacular, cercano con el jugador y con las ideas claras, pero ya se sabe cómo es el fútbol y cuando los resultados no llegan siempre lo paga el mismo. Es triste que el club tenga que destituir a un buen profesional para que los futbolistas tengamos que dar un paso al frente», señaló Chechu Flores al término del entrenamiento realizado en el estadio de atletismo.

El extemo jiennense se pone a disposición del nuevo preparador Claudio Barragán para ser titular el domingo (Rico Pérez, 12.00) ante el Santa Eulalia: «Jugué unos minutos en Formentera y me encontré bien, ahora trabajo como uno más y estoy preparador para lo que el entrenador quiera. Tengo muchas ganas de ayudar, hay que ganar ya y empezar a escalar posiciones, debemos cambiar cuanto antes la dinámica».

Chechu Flores se refirió a las palabras del director deportivo Javier Portillo, que ayer pidió a los líderes del vestuario que ejerzan como tal: «Aquí tienen que dar un paso al frente todos, no sólo los que llevamos varios años», matizó. El extemo será titular este fin de semana y sustituirá en el once a Connor, que en Formentera actuó por delante de Peña.

Por su parte, Juli también volverá a competir el domingo, un mes y medio después de sufrir una rotura muscular en el sóleo. El periodo de convalecencia ha sido mayor del esperado debido a que el atacante alcoyano tuvo que ser intervenido de urgencia de apendicitis.

Respecto a la semana pasada también se han recuperado el central Pol Bueso y el el extremo José Gaspar, por lo que sólo quedan en la enfermería Miguel Ángel Nieto y Moha, que estarán dos meses fuera de combate.

Resiembra

Ayer por la tarde comenzaron los trabajos de resiembra del estadio de atletismo del Monte Tossal, donde el Hércules entrena a diario. Los blanquiazules no podrán pisar este campo durante unos 15 días y entrenará en el Rico Pérez, cuyo terreno de juego también será tratado para eliminar las zonas con poco césped que aún se aprecian.