Gabriel Echávarri, alcalde de Alicante, afirmó hoy que los actuales dirigentes del Hércules tendrán que dar al final un paso para adquirir las acciones del club en la subasta realizada por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), ya que recordó que son los únicos que han mostrado interés.

El IVF convocó esta semana una segunda subasta de las acciones del club por un precio de 500.000 euros tras quedar desierta la primera ante la falta de ofertas. "Hay un proceso abierto y hay que ver quién va y quién no", dijo el alcalde, quien recordó que "hay unas personas interesadas, que son los gestores del club". "Entiendo que al final tendrán que dar un paso de la forma que sea porque son los únicos interesados", añadió Echávarri, quien no valoró el precio de la tasación de las acciones.

En cuanto a la situación del estadio José Rico Pérez, Echávarri indicó que el IVF se ha subrogado la posición de arrendador. "Han instado la resolución y serán titulares y podrían desahuciar para tener el bien inscrito y sin inquilino y así ofrecérselo a quién quieran", indicó. Sin embargo, el alcalde afirmó que "la ciudad no puede perder el control del campo", ya que garantizó que mientras esté en manos de la administración pública "siempre habrá fútbol" en Alicante. "Una vez se despejen las cuestiones jurídicas y registrales ya me sentaré con Illueca (director del IVF) para buscar la solución, que es que el Ayuntamiento se haga cargo del estadio por un periodo largo de tiempo para que al Hércules le dé tiempo a subir a Primera y comprar el estadio", explicó.

Mientras el club logra regresar a la elite, Echávarri plantea que el Hércules "pague un alquiler, el mismo que nos cobren a nosotros". "O bien la cantidad entera, los 200.000 euros, o bien por una parte y disponer del estadio nosotros para conciertos o eventos", especuló el primer edil. En cualquier caso, Echávarri aclaró que esta operación o cualquier otra relacionada con el estadio se llevará a cabo "siempre que no haya ningún impedimento legal".

Por último, el primer edil se mostró "optimista" a pesar del mal arranque deportivo del Hércules. "Este año el grupo es más duro, pero no nos viene mal que haya equipos grandes, como Mallorca o Elche, y filiales que dejen jugar", concluyó.