Una de las primeras medidas que debe tomar Javier García Portillo como máximo responsable de la parcela deportiva del Hércules es la de elegir entrenador. Es un secreto a voces que Carlos Luque no seguirá en el banquillo y los tres mejor situados en la agenda blanquiazul son, por este orden, Paco López, Vicente Moreno y Manolo Díaz.

Paco López, nacido en Silla hace 49 años, es el único con pasado herculano. Vistió la camiseta blanquiazul desde 1991 y 1994 y formó parte de la plantilla que ascendió a Segunda en junio del 93, con Quique Hernández de entrenador y un grupo en el que destacaban Eduardo Rodríguez (32 goles), Paquito, Parra, Falagán o Dani Barroso. Como entrenador ha desarrollado casi toda su carrera en Segunda B, a excepción de los cuatro partidos que dirigió en la categoría de plata con el Cartagena.

En el Hércules gusta mucho el trabajo de López en su dos últimos equipos, el Mestalla y el Villarreal B. Con una propuesta vistosa de juego, su método de trabajo es atractivo y también tiene carácter. El técnico valenciano ya sabe que el Hércules está interesado en él, pero renovará automáticamente con el filial amarillo si acaba la Liga entre los cuatro primeros, una opción muy abierta ya que quedan dos jornadas y su equipo tiene los mismos puntos que el Badalona. Está por ver si López prefiere seguir en la cantera del Villarreal o bien dar el salto al Hércules, algo que en «petit comité» ha reconocido que le hace ilusión.

Por su parte, Vicente Moreno, también valenciano y de 42 años, es probablemente el entrenador con más caché de los tres en el mercado y, de hecho, espera llamadas de algún equipo de Segunda.

En el curso 13/14 llegó al Nàstic con la Liga ya empezada, ganó 22 partidos seguidos y rozó el ascenso, logro que consiguió al año siguiente. En la categoría de plata realizó un año para enmarcar (15/16) pero esta misma campaña fue despedido porque el Nàstic era colista por una desastrosa planificación. De hecho, el conjunto catalán sigue ocupando puestos de descenso tras revolucionar la plantilla en enero.

Moreno es un técnico emergente, con una propuesta también atractiva, cercano al futbolista y que, al igual que López, conoce muy bien el grupo III de Segunda B.

Por su parte, Manolo Díaz, madrileño de 1968, realizó un buen trabajo en las categorías inferiores del Real Madrid y después dirigió dos temporadas a la Ponferradina en Segunda, equipo con el que descendió. Gusta su método de trabajo pero ofrece más dudas su fuerte carácter. Parece que es el que menos opciones tiene.