No cabe otra que intentar ganar al Alcoyano para no complicarse también jugar la Copa del Rey la próxima temporada. Con ese propósito afronta el Hércules los entrenamientos esta semana tras el fiasco que supuso perder ante el Villarreal B y dilapidar todas las opciones de disputar el «play off».

Carlos Luque tendrá que improvisar una pareja de centrales en el derbi de este domingo (18.00) contra el Alcoyano en el Rico Pérez. El entrenador blanquiazul no podrá contar en este partido con los servicios de Pol Bueso y Lolo, sancionados.

El castellonense vio la quinta amarilla por protestar el dudoso penalti a favor del Villarreal B. Por su parte, Lolo fue expulsado ante el filial amarillo y tampoco estará en el partido. Luque tendrá que recomponer el eje de la zaga y ayer el técnico entrenó con Román (que no estuvo en el último partido) y con Checa.

No pudo completar el entrenamiento Chema aunque sí que estará el domingo. El guardameta señaló que deben seguir compitiendo al máximo nivel «por respeto a la afición, al club, al contrato que tenemos y a nosotros mismos». El portero de Orihuela, que se encuentra a dos partidos de alcanzar los cien encuentros con el Hércules, termina contrato este año y ha confesado que le gustaría seguir en el club blanquiazul. «Sé quién soy, lo que ofrezco y lo que puedo dar. Partiendo de que pueda caer mejor o peor, mi idea prioritaria es seguir jugando aquí en Alicante», señaló.