Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramírez alcanzaron ayer un principio de acuerdo con el Instituto Valenciano de Finanzas para adquirir, a través de una subasta de urgencia, la mayoría accionarial del Hércules (70%), lo que allana definitivamente el camino para llegar después a un acuerdo con Hacienda, puesto que el constructor alicantino ahora sí está dispuesto a afrontar la deuda de 4,4 millones, tal y como exige la Agencia Tributaria.

Ramírez reconocía ayer al mediodía, una vez ya había trascendido el principio de acuerdo con el banco del Consell, que el Hércules estaba listo para solicitar en las próximas horas la liquidación voluntaria al no haber llegado a un pacto con el IVF, ya que no estaban dispuestos a avalar la deuda con Hacienda sin antes garantizarse el control del club.

El banco del Consell subastará el crédito contra la Fundación por el 70% de las acciones y el Hércules ofrecerá 300.000 euros. Este proceso es abierto, pero habrá una cláusula en la que los interesados deben hacer frente después a la deuda del Hércules con Hacienda y a la posible sanción que llegue de Bruselas y que condenaría a la entidad del Rico Pérez a pagar casi siete millones más. En un principio, Ramírez y el IVF habían acordado hace dos semanas un precio de 500.000 euros, pero finalmente ha conseguido una rebaja de 200.000 euros debido a la presión asfixiante de Hacienda, que dio de plazo hasta ayer para pagar o avalar los 4,4 millones.

Los trámites para realizar esta subasta urgente ya están en marcha y probablemente finalicen en dos semanas como máximo. Una vez que Ortiz y Ramírez ya sean propietarios del 70% de las acciones, todo parece indicar que llevarán a cabo una «operación acordeón», consistente en la reducción de capital y posterior ampliación para así reordenar el reparto accionarial.

La adquisición de la mayoría de títulos por parte de los dos empresarios era la condición indispensable que ambos exigían para ponerse al día con Hacienda. Ahora el acuerdo está encauzado y Ortiz avalará esos 4,4 millones. Por lo pronto, ayer abonó los 560.000 euros que se adeudan porque el club dejó de pagar en septiembre las mensualidades de 80.000 euros.

La última contraoferta del fisco contempla un convenio de cuatro años con una cuota mensual de 42.000 euros (480.000 al año) -la mitad de las cantidades actuales- durante los dos primeros años. En la tercera anualidad se debería pagar el 50% de la deuda pendiente y en el cuarto, liquidación total.

Alfonso García Cortés, ex administrador concursal de la entidad blanquiazul, tiene previsto viajar la semana que viene a Madrid para ultima esa propuesta de convenio.

Por otro lado, el Hércules también tiene entre sus planes de futuro comprar el Rico Pérez, aunque esta operación sólo la llevaría a cabo si milita en Primera División.

Las cuentas del banco del Consell son vender el estadio por 12 millones de euros, una cantidad que unida a los seis millones que Bruselas puede obligar a devolver al Hércules, dan la suma de los 18 millones prestados en su día por el IVF a la Fundación.