Luis García Tevenet sigue al frente del Hércules. De momento. Esta mañana dirigirá el entrenamiento en el Rico Pérez pero nadie del club garantiza que el domingo (17.00) se vaya a sentar en el banquillo del Rico Pérez en el choque ante el Hospitalet. Los principales valedores del técnico sevillano son Javier Portillo y Dani Barroso, miembros de la comisión deportiva. Ambos coinciden en que su trabajo es bueno y resaltan el unánime apoyo que tiene Tevenet dentro del vestuario. Pero, al mismo tiempo, le buscan un sustituto.

Uno de los que ha declinado la propuesta blanquiazul en las últimas horas es el exazulgrana Sergi Barjuán. El Hércules es uno de los equipos más apetecibles para los entrenadores en Segunda B, pero se encuentra en una situación límite: a cinco puntos de la cuarta plaza a falta de 11 partidos. Por este motivo varios técnicos han dicho no. Otros piden un contrato de larga duración, o de una temporada y media, que el club no está en disposición de firmar debido a su delicadísima situación institucional y financiera.

Mientras la comisión deportiva sigue «peinando» el mercado, Tevenet continúa al frente de un grupo que aún no ha perdido la fe en él. «Si los jugadores no estuvieran conmigo, hoy hubieran salido andando aquí», afirmó el sábado nada más caer ante el Lleida. No le falta razón, pero también es cierto que los datos son demoledores. El Hércules ha perdido cinco de los últimos siete partidos y las dos únicas victorias fueron ante el Sabadell, que despidió a su técnico al día siguiente, y el desahuciado Eldense, que lleva camino de batir todos los récords negativos imaginables.

Y ha mordido el polvo frente al Barcelona B, Llagostera, Mestalla, Badalona y Lleida. Las estadísticas ante los rivales directos son aún más preocupantes ya que el Hércules sólo ha sido capaz de sumar un punto de 24.

Tampoco ayuda a Tevenet el paupérrimo juego que despliega su equipo desde hace varias semanas. Y preocupa especialmente el nulo aprovechamiento de jugadores llamados a marcar diferencias como Miguel Ángel Nieto o Javi Flores, que se quedaron sin minutos ante el Lleida sorprendentemente, una decisión que no ha sido entendida tampoco por sus superiores. En esa obsesión por no encajar goles, el Hércules no disparó a puerta en los primeros 66 minutos y el primer cambio fue Omgba.

En la cúpula directiva del Hércules hay diversidad de opiniones, pero finalmente él brazo ejecutor es el del apoderado Juan Carlos Ramírez, quien nada más acabar el choque ante el Lleida afirmó que «el 90% de la culpa es de los jugadores» y criticó (aunque sin citarle) que Dalmau no cortara a tiempo ese contragolpe en el minuto 94. «Hay que enviar al rival a la valla, no se pueden seguir cometiendo estos errores», añadió Ramírez.

En la misma línea, jugadores como Checa o José Gaspar también entonaron el mea culpa y afirmaron que los errores individuales no pueden ser todos achacables al entrenador. «Espero y deseo que siga con nosotros», afirmó el mediocentro sevillano.

Salinas, sancionado

El canterano Álvaro Salinas vio, ante el Lleida, la quinta amarilla de la temporada, por lo que se perderá el encuentro del domingo ante el Hospitalet. Salinas es uno de los atacantes más utilizados por Tevenet y el pasado sábado incluso jugó por delante de pesos pesados como Mainz, Javi Flores o Nieto. El canterano será baja por sanción frente al Hospitalet mientas que vuelve a estar disponible el central Fernando Román, ausente en Lleida por este motivo. El centrocampista Miñano sigue con cuatro amarillas. Están descartados también para el siguiente encuentro los lesionados Chechu Flores y Pedro Inglés.