El canterano Iván Buigues recibió cinco puntos de sutura en el labio en el descanso del choque ante el Lleida del pasado sábado. El meta de Mutxamel sufrió un fuerte golpe en el rostro en un choque con su compañero Juanma Espinosa cuando el mediocentro protegía el balón dentro del área pequeña.

El partido se tuvo que parar en un par de ocasiones ya en la primera mitad porque el canterano estaba indispuesto y, de hecho, en el descanso todo parecía indicar que el veterano Chema Giménez iba a sustituirle ya que calentó con mayor intensidad. Pero Iván se empeñó en continuar y así lo hizo. Los charcos de sangre en el vestuario alertaron a sus compañeros y Tevenet le recomendó que se quedara en el banquillo, a lo que el jugador se negó.

Al margen de los cinco puntos de sutura recibidos, también tiene un diente roto y la nariz hinchada por el golpe. Aún así hoy tiene previsto trabajar como uno más. Nada más acabar el choque del sábado, el portero mutxameler fue consolado por el delegado Quique Sala en el centro del campo ya que estaba abatido, como la mayoría de compañeros.

El Hércules regresa esta mañana a los entrenamientos en el Rico Pérez, donde llevará a cabo una sesión de recuperación marcada por la continuidad de Tevenet, que sigue al frente del equipo pero desde el club no ocultan que se le busca sustituto.