El Hércules ha sufrido en Palamós, ante el Llagostera, la octava derrota de la temporada en un partido en el que mostró dos caras opuestas y en el que mereció, al menos, un punto. El primer cuarto de hora fue nefasto para los alicantinos, con su zaga fuera de sitio y sin contundencia. Y eso le costó dos goles. En el 11', Manel marcó a placer en el área pequeña tras varios rechaces en un saque de esquina. Y en el 15' llegó el 2-0 en una contra. Rubén remató a bocajarró ante Iván y el rechace del meta de Mutxamel cayó a los pies de Nando, que sólo tuvo que empujarlo.

Tevenet dejó en el vestuario a Pol Bueso y dio entrada a Javi Flores, quien le cambió la cara al Hércules y dio una magnífica asistencia a Dalmau, en el 53', para que se plantara solo ante el portero y le superara. Durante toda la segunda parte el Hércules fue el dueño del balón y puso cerca al área catalana, pero le faltó puntería. Javi Flores, Mainz y Juan Delgado tuvieron las ocasiones más claras.