Tras firmar la pasada semana su contrato con el Hércules y después de debutar en la derrota del equipo en su visita al Barcelona B (2-0), Lolo Ortiz vivió ayer su puesta de largo con los colores blanquiazules en el Rico Pérez. «Me llamó Tevenet cuando se enteró de mi situación. Tengo tres niños y no queríamos que tuvieran muchos cambios en su vida. El club estaba interesado y le dije a mí representante que llegara a un acuerdo rápido porque me apetecía disfrutar de un club como el Hércules», dijo el onubense en una primera declaración de intenciones.

El onubense considera que su pasado como capitán del Elche no influye en esta nueva etapa de su carrera. «Sé que existe una rivalidad pero a mí lo que me gusta es jugar a fútbol independientemente del club. Cuando voy a un equipo, me centro en él. Ahora estoy en el Hércules y me debo 100% a su proyecto. Soy un chico comprometido y lo voy a dar todo para conseguir el ascenso. Por falta de ganas no va a ser», apuntó Lolo en la sala de prensa del Rico Pérez.

La pasada temporada tuvo un papel protagonista en el Elche de Rubén Baraja pero este año, con el cambio en el banquillo que supuso la llegada de Alberto Toril, su rol perdió importancia. «Mi situación cambió por el gusto del entrenador. Baraja me transmitió confianza y me dijo que iba a ser el líder del equipo, hasta me nombró capitán. Con Toril fue diferente. Ve los partidos mucho más abiertos que Baraja, con llegadas continuas al área por encima del equilibrio. No ha podido ser y nuestros caminos se han separado», explicó.

«La primera impresión que me he llevado del vestuario en el viaje a Barcelona ha sido muy buena», añadió el futbolista.