El Alcoyano se adjudicó con autoridad el derbi provincial ante el Hércules, al que goleó y sumió en su primera crisis de la temporada, ya que el cuadro de Tevenet queda a ocho puntos del Deportivo y a diez del líder Barcelona B. Los blanquiazules encajaron ayer su sexta derrota del curso frente a un Deportivo que sigue con su particular estado de gracia en El Collao, donde no pierde desde hace 13 meses y ha encadenado siete victorias.

Sale tocado Tevenet de Alcoy pero también jugadores que están muy lejos del nivel esperado (algunos de ellos aún no han aparecido por Alicante) como Omgba, Dalmau, Gaspar o Berrocal. El técnico criticó, por primera vez en la temporada, la falta de intensidad de sus futbolistas, y se marchó de la sala de prensa sin contestar a la pregunta de si veía peligrar su puesto.

La crisis de juego y resultados del Hércules quedará difuminada esta semana por el partido copero del miércoles ante el Barcelona (22.00), pero a nadie se le escapa que otra derrota ante el Baleares el domingo al mediodía (Rico Pérez, 12.00) podría abrir la puerta de salida del técnico sevillano.

No es menos cierto que el cuadro blanquiazul afrontaba el derbi de ayer con la ausencia de cinco titulares (Chema, Román, Peña, Nieto y Javi Flores), pero también que le faltó ambición y agresividad, dos requisitos imprescindibles para cualquier equipo que aspire al ascenso.

Había mucho miedo a perder en ambos banquillos y por ello en los primeros 20 minutos nadie asumía riesgos en la conducción. El 1-0 (23') llegó en una acción aislada, con centro muy pasado de José García desde la derecha que el lateral Navarro remató de cabeza tras colarse entre Dalmau y Gaspar. El balón entró por el palo de Iván Buigues, sorprendido por la facilidad con la que cabeceó el jugador alcoyanista.

El Hércules, que no disparó entre los tres palos durante todo el partido, tuvo la mejor ocasión para empatar sólo cuatro minutos después. Miñano hilvanó un contragolpe letal, condujo el balón durante muchos metros y asistió en el área a Chechu, quien fue derribado torpemente por Barrera.

El extremo jienense, ayer capitán en ausencia de Peña, asumió una vez más la responsabilidad del lanzamiento de penalti, pero envió el balón lejos de la portería en su intento de buscar la escuadra. Un error imperdonable en partidos tan igualados y escenarios tan hostiles.

Poco más pasó en una primera parte de mucha intensidad y poco fútbol hasta que el canterano del Hércules Pedro Inglés decantó el partido definitivamente del lado local con la segunda amarilla que vio en el minuto 45 por una falta evitable en el centro del campo sobre el delantero David Torres. El canterano de Benijófar, muy nervioso en un choque de alta exigencia, se las tuvo tiesas antes con su excompañero Mariano y se veía venir su expulsión.

Con el 1-0 y un jugador más, el Alcoyano tenía el partido en situación inmejorable, pero tras el descanso decidió retrasar sus líneas y cedió todo el protagonismo a un Hércules que con diez jugó mejor que con once. Aún así, las ocasiones no llegaron y Marc Martínez fue un mero espectador.

Tevenet dejó a Omgba en el banquillo y dio entrada a Juanma Espinosa, al tiempo que rehizo su defensa con Chechu Flores en el lateral derecho y Dalmau en el izquierdo, un movimiento de piezas que no tuvo el efecto deseado porque alejó del área rival a uno de los atacantes más desequilibrantes del Hércules.

Con Gaspar y Berrocal desaparecidos, el Alcoyano no veía peligrar el resultado y la aproximación más clara de los visitantes fue una internada de Chechu en el área, con gran pase de Miñano, pero después no tomó la decisión correcta a la hora de asistir y la acción acabó en saque de esquina.

El 2-0 (75') tuvo marcado regusto de «vendetta» ya que lo protagonizaron en exclusiva los exherculanos Álvaro García y Manuel Gato, descartados por la comisión deportiva el pasado verano. El primero, notable como lateral derecho, metió un balón de oro a la espalda de los centrales que el punta controló a la perfección y ejecutó aún mejor, enviando el esférico a la escuadra.

El 2-0 terminó de descomponer al Hércules y el 3-0, obra de Ángel, llegó tras una mala cesión de Chechu, de nuevo muy desdibujado. El Collao acabó festejando su séptima victoria consecutiva, que le aleja a ocho puntos del Hércules y le permite seguir la estela del líder Barcelona B. Bajo la batuta del valenciano Seligrat, el Deportivo se reafirmó ayer como un candidato muy serio al ascenso.