Más allá de que los amistosos de pretemporada sirven para que los jugadores vayan cogiendo ritmo de competición y los equipos automatismos, el Hércules de Tevenet dejó buenas sensaciones en su estreno en el Rico Pérez. El equipo blanquiazul consiguió un empate sin goles ante uno de los gallitos de Segunda, un Rayo Vallecano que acaba de descender de la máxima categoría del fútbol español.

El estadio presentó buen ambiente en el primer test veraniego y la grada tenía ganas de ver a las caras nuevas del Hércules. De los cinco fichajes, tres formaron parte de la alineación inicial: Dalmau, Román y Checa. El trío de debutantes dejó detalles destacados. Dalmau llega para acabar con los interminables problemas que el equipo sufrió la pasada temporada en el lateral derecho, Checa aporta entrega y aplomo en el pivote y Román se mostró rápido al cruce y exhibe valentía para liderar una zaga huérfana después de las salidas de Álex Muñoz y Atienza.

Tras el descanso llegó el turno de Berrocal y Omgba. El delantero andaluz demostró que es un ariete a la antigua usanza, capaz de bajar balones en el frente de ataque y oxigenar el juego con criterio. Empezará la Liga como titular en Gavà por la sanción que arrastra Mainz del pasado curso. Más gris se mostró Omgba, un fajador en la medular que será útil en otros escenarios. El Hércules de Tevenet se mostró contundente en las dos áreas al tiempo que dejó patente que el entrenador tiene que trabajar mucho sobre su sala de máquinas.

El partido empezó vibrante con un Hércules lanzado por Nieto, protagonista de la primera ocasión en los compases iniciales. Con el paso de los minutos el Rayo impuso su mayor calidad, con Trashorras como faro. Así llegaron las mejores ocasiones de los vallecanos, a través de las botas de Aguirre y Montiel. Las intentonas visitantes tuvieron buena respuesta en un Iván Buigues que un año más va a pelear la portería de tú a tú a Chema.

El Hércules fue valiente en la presión, con Miñano y Juanma Espinosa persiguiendo a los jugadores del Rayo hasta su área en la salida del balón. Sólido atrás, el conjunto blanquiazul pudo marcharse en ventaja al descanso con un remate de Chechu que salió alto tras una carrera de Dalmau que llegó a la línea de fondo.

La segunda parte dejó un partido diferente, con el Rayo modificando su once por completo y un Hércules con cuatro cambios de inicio. No tardó mucho más Tevenet en darle pista al batallón de canteranos. Siro y Salinas enseñaron su calidad entre los ramalazos de talento de un Javi Flores llamado a dejar tardes de gloria en el Rico Pérez.