Juan Carlos Román, más conocido en el balonmano español como «Juanqui» o «Rambo», no podía ocultar ayer su emoción al acompañar a su hijo Fernando en la firma de su nuevo contrato con el Hércules. El exjugador del Atlético y Caja Madrid fue internacional y recordaba las numerosas batallas deportivas vividas en Alicante, primero contra el Calpisa y después contra el Tecnisa y el Tecnisán. Los nombresa de Javier Cabanas, Nacho Novoa o Perramón venían ayer a su mente, a escasos metros del pabellón que tantas veces visitó.

Los dos hijos de «Rambo», Juan Carlos y Fernando, han seguido la estela deportiva de su padre, pero ambos eligieron el fútbol, una decisión asumida con resignación por su progenitor. Juan Carlos milita en el Alcobendas Levitt de Tercera mientras que Fernando jugará en el Hércules cedido por el Alcorcón. El nuevo central blanquiazul destaca por sus 1,94 metros de estatura y las referencias que tienen los técnicos son muy buenas. Formado en la cantera del Real Madrid y en el Unión Adarve, la pasada campaña, con 22 años, disputó 19 partidos en Segunda División, 12 de ellos como titular, y marcó un gol. La llegada del rumano Cosmin Contra le cerró las puertas del primer equipo madrileño este verano y el Alcorcón apostó por su cesión.

Equipos como el Fuenlabrada, el Albacete o la Ponferradina se interesaron también por él, pero desde un prinicipio el central tenía claro que el Hércules era su destino ideal. Y también se lo hizo ver su representante, el benidormí Antonio López, exjugador del Atlético de Madrid.

El Hércules apuesta fuerte por Román porque esta temporada ya no ocupa ficha sub'23 y la comisión deportiva confía en que haga olvidar a «Pichu» Atienza y Álex Muñoz, que se han marchado recientemente al Reus y al Sevilla, respectivamente.

El nuevo zaguero pasó ayer reconocimiento médico en Vistahermosa y después conoció a sus compañeros en Fontcalent. Podría incluso debutar en el amistoso de mañana frente al Rayo Vallecano en el Rico Pérez. La llegada de Román era muy esperada por el técnico Luis García Tevenet, que en los dos amistosos disputados hasta la fecha ha utilizado al mediocentro Checa como central. La comisión deportiva sigue sondeando el mercado en la búsqueda de otro central profesional que compita con Rojas y Román. El valenciano Pol Bueso, del UCAM Murcia, es uno de los mejor colocados porque actúa indistintamente como central y lateral izquierdo, una posición que se queda coja con la inminente salida de Connor como cedido.