El Hércules acudió ayer a Santa Faz para cumplir con la tradicional ofrenda tradicional ofrenda con una única baja: la de su capellán, Isidro Hernández Escamilla. El sacerdote, que en 2015 tomó el relevo del fallecido Pater Parreño, cesó en sus funciones hace un mes al colgar los hábitos. «Me salí del ministerio», confesó ayer por la tarde sin ofrecer más detalles sobre su decisión: «Es un cuestión estrictamente personal», se limitó a decir. «Soy licenciado en Filosofía y Letras y ahora estoy buscando trabajo. Eso sí, sigo siendo herculano y cuando mejore mi situación actual volveré al estadio».

La ausencia en Santa Faz fue cubierta, no obstante, con el más alto representante de la curia en la zona: Monseñor Murgui, actual obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante, que acabó confesándose un herculano más. «Me he enterado que estaba el Hércules en Santa Faz y he querido recibiros», dijo a la plantilla herculana dentro del monasterio. «Os quiero desear lo mejor. Os sigo cada semana. Vi que el otro día ganasteis al Olimpic y me alegré mucho. Estamos sufriendo por vosotros porque hace falta el ascenso. Por favor, ponedlo todo y que el grito de 'Macho Hércules' vuelva a sonar bien alto», agregó el prelado.

Según desvelaron fuentes del club, será el propio Murgui quien designe en breve a un nuevo capellán para sustituir al dimisionario Hernández Escamilla en el Hércules.

Carlos Parodi, presidente del Hércules, recordó en el día de ayer la figura de Pepe Alcaraz, el directivo de Peñas fallecido recientemente, y agregó que la visita a la Santa Faz es «una cita ineludible para el club» y añadió que ojalá pueda repetirse esta visita en junio, tras un ascenso, porque «sería buena señal y una buena alegría para el club».

«He pedido el ascenso, he pedido salud, que nos ayude porque es un año crucial para el club. El equipo va encaminado para lograr el objetivo pero todavía nos quedan por dar pasos», puntualizó.

Paco Peña, capitán del Hércules, resaltó que «es un gusto estar aquí por lo que significa para los alicantinos y para el Hércules, es algo que intentamos inculcar a la plantilla», ha dicho.

«Ojalá podamos volver en junio para celebrar algo», ha incidido Peña, que ha sido el encargado de dirigir una oración a la Santa Faz en representación de la plantilla.

Peña, Chechu Flores y Chema Giménez, como capitanes del equipo, también han realizado una ofrenda floral a la Faz Divina, al igual que han hecho Parodi y el vicepresidente del club, Valentín Botella, aclamados por los niños a la entrada al monasterio.