«Ilusionado y contento con mi nueva faceta». Así se muestra Javier Portillo tras poner recientemente fin a su carrera profesional como futbolista. El exdelantero se ha convertido en la mano derecha del director deportivo del Hércules, Dani Barroso. «Aprendo cada día, voy codo con codo con Dani y me estoy formando en el curso de director deportivo. Somos más de 65 alumnos, entre los que se encuentran muchos exfutbolistas: Roberto Carlos, Marcos Senna, Josemi, Mario Bermejo, Jesús Vázquez...», apunta el madrileño.

Aunque no hace mucho que ha dejado de vestirse de corto, Portillo ya echa de menos el césped: «Lo echaré siempre de menos. He dejado de hacer lo que he hecho toda mi vida, desde que tenía 7 años. Ahora juego con mi hijo o pachangas con los amigos... Es una época pasada y lo que me toca en este momento es estar en el día a día del Rico Pérez y compartir en Madrid las aulas con excompañeros».

Portillo agradece las declaraciones de Vicente Mir en las que el técnico aseguró que le gustaría contar con el madrileño en la plantilla y analiza a su sustituto en el equipo, David Mainz: «Cuando llegó, como cualquier jugador, necesitaba un periodo de adaptación. Está más tranquilo, más estable, con más confianza en sí mismo. Es un chico con mucha ambición, se deja la piel en cada partido, hace un trabajo muy bueno para el equipo que no se ve como los goles».

Aunque asegura que se sigue sintiendo «delantero y uno más de la plantilla», su relación con el vestuario ha cambiado: «No me pongo una barrera porque son mis compañeros y algunos amigos pero hay que mantener la distancia. El jugador necesita su espacio. Dani y yo sabemos que es una zona privada. Pasamos lo justo y necesario por el vestuario».

El madrileño mantiene la esperanza en que el equipo acabe en segunda posición: «El Hércules está bastante mejor, hemos tenido resultados positivos. Era muy importante ganarle al Mestalla y lo conseguimos. Sacamos buenos resultados contra Lleida, Reus y Sabadell. La dinámica es positiva y hay que seguir en esta línea. Nos lo jugamos todo».

Por último, Portillo explica el trabajo que desempeña ahora en el club blanquiazul: «No paro de ver jugadores, tanto para Segunda como para Segunda B. Y también veo partidos de los rivales que nos encontraremos en el playoff. Como futbolista era muy exigente conmigo mismo y ahora lo seré con los futbolistas. Buscamos perfiles para construir el Hércules que queremos, es innegociable. Intento ayudar en todo lo posible, también al fútbol base. Me encantaría que hiciéramos una gran cantera. Es un trabajo bonito pero difícil».