El panteón 440 de la calle San Ramón, ubicado en la manzana G del cementerio de Alicante, a pocos metros de la entrada principal, no exhibe imagen ni inscripción. Sin embargo, según confirma la dirección del cementerio alicantino, allí reposan los restos de Vicente Pastor Alfosea, «El Chepa», fundador del Hércules, fallecido un día de junio de 1939, a la edad de 37 años, días antes de que concluyera la Guerra Civil, conflicto que interrumpió la carrera del Hércules en Primera División.
Al parecer, los restos de Vicente Pastor acabaron en el panteón de la familia política de su tía Teresa, familiar directo que se hizo cargo del fundador del Hércules cuando quedó huérfano de madre, según detalla Luis Taza, sobrino del «Chepa».
El propio Taza desvela que problemas con la propiedad del panteón han dificultado varios intentos de colocar una inscripción sobre la lápida donde reposan los restos de Vicente Pastor. «La familia estaría encantada de poder resolver ese problema de alguna manera. Lo normal sería que en ese lugar hubiera una imagen y alguna inscripción que dejara constancia de que allí reposan los restos del fundador del Hércules, una institución emblemática de la ciudad», señala Luis Taza.
Años atrás, la Asociación Herculanos promovió identificar como corresponde el lugar en el cementerio de Alicante. De hecho, hubo un acto presidido por José Rico Pérez en el que se depositaron flores y un cartel con la foto y nombre del «Chepa» encima de la lápida. La inscripción, al parecer, no duró demasiado en el lugar donde se colocó.
«Debería colocarse de alguna forma algo en ese lugar que identificara que allí reposa el Chepa y que no pudieran arrancar», interviene José Juan Huesca, conocido herculano y uno de los promotores de aquella iniciativa. «No es de recibo que no haya nada que señale el lugar donde está sepultado el fundador del Hércules. Estaría bien que el club tomara cartas en el asunto. Sería un buen detalle que la afición agradecería», agrega Huesca, quien considera que el lugar, bien señalizado y ubicado, pasaría a ser un lugar de culto de los hinchas herculanos.
