Sergi Guardiola, delantero despedido por el Barcelona a las seis horas de haber firmado su contrato por sus «tuits» ofensivos contra Catalunya, ha entrado de lleno en la agenda del Hércules en este mercado invernal. El director deportivo Dani Barroso habló ayer por teléfono con él y le insistió en que tiene sitio en el equipo alicantino, aunque el jugador no quiere tomar ninguna decisión en caliente y valorará todas las ofertas que le lleguen en las próximas horas.
El interés del Hércules por Sergi Guardiola se remonta al mercado de invierno de la pasada temporada. El delantero marcó tres goles a los blanquiazules en dos partidos (con la camiseta del Eldense) y el Barroso intentó por todos los medios ficharle hace justo un año. El jugador dio su visto bueno pero el club del Pepico Amat exigió una contraprestación económica que el Hércules se negó a pagar. Ocurrió lo mismo con el extremo Abraham Noe, entonces en el Badalona y ahora en el Alcoyano.
El fichaje de Guardiola no se pudo concretar en verano porque los 14 goles que marcó con el Eldense despertaron el interés de varios clubes de Segunda y finalmente firmó un muy buen contrato de tres temporadas con el Alcorcón, a razón de unos 250.000 euros por campaña. Pero en el equipo madrileño no ha tenido minutos y por eso el Hércules volvió a llamar a su puerta hace varias semanas.
La oferta blanquiazul fue de las primeras que le llegó, pero el jugador balear respondió que no tenía intención de descender a la categoría de bronce. Hizo una excepción al llegar la propuesta del FC Barcelona para reforzar su filial, actualmente en puestos de descenso a Tercera. Pero se convirtió en el jugador más efímero de la historia del club catalán porque sólo seis horas después de firmar su contrato fue despedido por unos mensajes publicados hace más de dos años en su cuenta de la red social Tuiter en los que insultaba al Barcelona y a Catalunya. La entidad «culé» reaccionó con celeridad y le despidió en tiempo récord por sus comentarios ofensivos.
La noticia ha recorrido todo el mundo y de nada han servido las disculpas de Guardiola, quien por otra parte defiende que esos mensajes publicados en su cuenta no los escribió él, sino un amigo. El futbolista se encuentra ahora en Jumilla, donde reside desde que era pequeño, y está valorando todas las posibilidades que le ofrece el mercado. Ahora se encuentra sin equipo y aún lamentándose por haber dejado escapar dos años más de contrato en el Alcorcón con una ficha elevada.
Al margen de Guardiola, el Hércules sigue trabajando en varios frentes para reforzar su plantilla y las dos negociaciones que están muy cerca de llegar a buen puerto son las del extremo Álvaro García y el mediocentro Vivancos, procedentes del Huracán y Girona. El acuerdo con ambos es total y sólo falta que se desvinculen de sus actuales equipos. En el caso del alicantino Álvaro, romperá su contrato con Huracán porque sólo ha cobrado media mensualidad desde agosto. Por su parte, Vivancos llegará en calidad de cedido y ocupará una de las fichas sub'23 vacantes.
