Manolo Hererro afronta mañana en Lleida un partido comprometido con el Hércules que dirige. Las dos derrotas consecutivas escuecen en el seno de la plantilla, sobre todo por la imagen ofrecida en la Copa del Rey. El técnico, más serio ayer que de costumbre, espera un cambio de imagen que revierta la mala dinámica de resultados.

El Hércules vuelve al campo en el que cayó eliminado de la Copa del Rey hace unos días. ¿Qué espera de su equipo en esta segunda visita?

Espero que el resultado sea muy diferente, que hagamos las cosas bien y compitamos, porque jugar bien en ese campo es prácticamente imposible. Lo que sí se puede hacer es competir. Y sí que es verdad que tenemos que mejorar muchísimo lo que hicimos en el partido de Copa, sobre todo porque no estuvimos bien las acciones de estrategia, donde ya sabía que se puede decantar un partido cuando juegas en un estadio en tan pésimas condiciones.

¿Cree que el estado del terreno de juego ha podido mejorar en diez días?

No tengo información, pero en diez días tampoco da margen a que mejore muchísimo. Además, hace dos días el Lleida jugó un partido de Copa, creo que no va a estar bien. Puede ser que esté un poquito mejor, pero estaba tan mal que aunque mejore un poco va a ser difícil que se pueda jugar en ese campo.

¿Has podido confeccionar más o menos bien el equipo a pesar de las bajas?

La única baja importante que tenemos es la de Rafita para un mes. El único jugador que tiene en su puesto es Baldo, pero viene con un condicionante, y es que prácticamente no ha entrenado ni ha jugado a lo largo de todo este tiempo. Eso condiciona muchísimo y estamos barajando las opciones a valorar.

¿Va a ocupar pues Connor la plaza de Rafita?

Es una opción. Puede jugar Connor, Rojas, Paco Peña, hay bastantes posibilidades.

¿Cómo ha vivido la semana el vestuario después de las dudas surgidas por la eliminación de Copa y el 0-4 recibido en casa ante el Villarreal?

Los primeros días son difíciles, pero tras el día de descanso ya vuelves pensando en el partido del Lleida. Tenemos que cambiar el chip y solamente pensar en lo que nos viene. La gente ha trabajado bien, como todas las semanas. Ha sido una semana normal.

¿Cómo ha sido la semana para Portillo después de los silbidos del domingo pasado?

Normal.

El equipo no ha marcado goles, pero recibió cuatro el pasado fin de semana. ¿Cree que se está siendo demasiado crítico con la delantera cuando defender es misión de todo?

Hemos sido un equipo vulnerable en estos últimos partidos, es verdad. El otro día nos metieron cuatro goles porque íbamos por detrás en el marcador, tomamos riesgos ante un equipo de la calidad y velocidad del Villarreal B, y lo sufrimos. El equipo quería hacer goles y meterse en el partido, y lo que tenemos que intentar es que el equipo contrario no se ponga delante en el marcador para evitar tomar esa serie de riesgo que tomamos, que al final lo pagamos muy caro. Cada vez que llegaron ellos nos hicieron gol. Pero luego en el cómputo global nosotros tuvimos nuestras opciones y estuvimos bien en líneas generales. El 0-4 no refleja para nada lo que sucedió sobre el terreno de juego.

¿Nota más presión en el entorno ahora, tras las dos derrotas, a pesar de que la temporada acaba de empezar?

No, encuentro la misma presión que cuando empecé. Sé en el club donde estoy y el nivel de exigencia que hay.

¿Le ha llamado la atención el hecho de que, aunque sea el Hércules, se ha pasado de la euforia de las dos primeras jornadas al pesimismo de ahora dos semanas después?

Para nada, el fútbol es así. Pasas de héroe a villano en una semana. No me sorprende absolutamente nada, el año pasado fue igual. Y el que hace un mes te decía que eras muy bueno, ahora te dice que eres muy malo.

¿Está preparado psicológicamente el vestuario para gestionar esa presión de ser primero si después de las primeras jornadas se ve a cinco o seis puntos del líder?

Nosotros tenemos un objetivo: quedar primero en la jornada 38. No nos gustaría estar a esa distancia del liderato, pero cuando quedan treinta y pico jornadas por delante, debemos tener un poco de tranquilidad y equilibrio. Si nos volvemos locos a las primeras de cambio... Por mi parte al menos, no va a ser así, y voy a dar equilibrio a toda la gente que hay alrededor de mí. Sabemos que ahora tenemos un calendario complicado con rivales muy fuertes y luego se suaviza un poco el calendario. Hay que valorar muchas cosas. Es muy pronto para hacer una valoración sobre quién va a ser el primero y el último. Hay que esperar al menos un tercio de la competición.