Primer contratiempo serio para Manolo Herrero, técnico del Hércules en esta temporada 15/16. El lateral Rafita, una de sus piezas fundamentales, estará un mes alejado de los terrenos de juego por el esguince de rodilla sufrido ante el Villarreal B.
El zaguero balear se dañó la articulación en un gesto fortuito y abandonó el campo, antes de que finalizara la primera parte, con evidentes gestos de preocupación ya que la rodilla le hizo un extraño. Ayer se confirmó que sufre un esguince de grado I del ligamento lateral interno.
La mala suerte se ha cebado con el Hércules porque el primer lesionado serio del curso es el único que no tiene sustituto natural, ya que el canterano Baldo Santana tampoco está disponible. De hecho, no jugó con el filial el pasado domingo en La Nucía debido a unas molestias en el cuádriceps que le obligaron a acabar el entrenamiento del viernes antes de tiempo. En principio mañana podría regresar al trabajo, pero su estado de forma no es óptimo porque arrastra una larga inactividad. El año pasado no jugó nada por diferentes lesiones y por este motivo solicitó al club competir con el filial los fines de semana para estar rodado por si le tocaba dar el salto al primer equipo.
Con este panorama, se le plantean diferentes alternativas a Herrero. Ante el Villarreal B optó por colocar en el lateral derecho a Álex Muñoz y, por este motivo, el canterano puede ser su primera opción para suplir a Rafita el próximo mes. La competencia entre los centrales es este año más fuerte que nunca y Herrero tiene ahora la oportunidad de alinear a los tres de inicio, aunque con Álex escorado a la derecha y la pareja de sevillanos Atienza y Rojas por el centro.
Otra opción que se le presenta al entrenador es cambiar a Peña de banda y dejar a Álex en su perfil zurdo natural, una posición en la que jugó siempre hasta que Pacheta le probó de central el pasado verano.
Herrero también podría probar un cambio de sistema como ya hizo el año pasado cuando arreciaron las bajas. En varios encuentros apostó por tres centrales y dos carrileros, que en esta caso serían Nieto y Paco Peña.
Chechu Flores, sin fecha
El extremo Chechu Flores, otro de los pilares de este Hércules, cumplió ante el Villarreal B su tercer partido de sanción y ya podría volver a jugar, pero antes debe superar las molestias en el dedo fracturado del pie.
El doctor Ripoll estimó que reaparecería el próximo domingo en Lleida (19.00 horas), pero estos plazos no se cumplirán y hasta final de mes no volverá a competir en el mejor de los casos. Todavía no ha entrenado con el grupo y tampoco pudo realizar la pretemporada ni participar en los amistosos.
El regreso de Chechu es especialmente importante para Herrero ya que le permitiría disponer de Gato como delantero, al margen de que es un futbolista que marca diferencias y contagia su espíritu competitivo al resto del grupo. Además, tiene carisma y la grada le quiere, algo que el equipo necesita más que nunca tras la enésima bronca recibida por Portillo ante el Villarreal B.
