Una pequeña lesión muscular impidió al canterano del Hércules Baldo Santana disputar el primer partido de pretemporada de los blanquiazules contra el Huércal-Overa y también le privará mañana de jugar ante el Albacete en el segundo amistoso. Esta fue la tónica general de la pasada campaña para el lateral diestro, algo que el jugador desea que quede atrás: «Espero tener más suerte que el año pasado y que las lesiones me respeten».

Baldo profundiza en esta idea. «Tengo ilusión por jugar y ganas de entrenar. Las opciones de disputar minutos pasan por el empeño que le ponga yo. El entrenador me ve trabajar y luego toma una decisión», asegura para lamentar a continuación: «Me hubiera venido bien jugar estos primeros amistosos de pretemporada para demostrarle más cosas al entrenador. Él nos transmite tranquilidad y lo deja todo en nuestras manos. Un futbolista lo que quiere es no tener molestias físicas. Las lesiones siempre vienen en mal momento y un jugador pretende evitarlas».