«Volaban las mesas, las sillas, botellas de vidrio y todo lo que encontraron a mano», relató el encargado del pub «Concerto», céntrico establecimiento de la calle teniente Álvarez Soto de Alicante, escenario de una batalla campal entre hinchas del Elche y del Hércules en la madrugada del domingo.

Alrededor de cuarenta personas participaron en la trifulca que, finalmente, arrojó un balance de seis detenidos, un herido de consideración y varios contusionados. La batalla, que finalizó con persecución policial en el centro de la ciudad, registró escenas de violencia desatada, según detalló en su declaración ante la Policía el encargado del local.

En su relato, este último explicó que a las 23:45 horas «un chico que se encontraba en el interior del bar» le hizo saber que peligraba su integridad física si salía del establecimiento dado que en la terraza estaban sentados «ultras de la Jove Elx» a quienes conocía por asuntos de rivalidad deportiva y que «podían propinarle una paliza». Ante ello, el encargado -siempre según su versión- se dirigió al grupo citado «que conocía por ser clientes habituales» para trasladar la preocupación del joven que se encontraba dentro «recibiendo un mensaje de tranquilidad» por parte de los ultras ilicitanos «que se comprometieron a dejarle marchar».

El relato del gerente de «Concerto» prosigue con los acontecimientos que, según él, sobrevinieron quince minutos después, al hacer acto de presencia un grupo de «entre 20 y 25 personas provistas de puños americanos, palos, cinturones y demás útiles para la pelea, a la vez que gritaban frases tipo 'Macho Hércules, Puto Elche'». En ese punto, el citado encargado agrega que se inició la pelea: «Cargaron contra los que se encontraban sentados en la terraza a la vez que estos se defendían de las agresiones».

A raíz de ello, amigos de los hinchas del Elche que se encontraban en el interior del local fueron «al lugar de la reyerta» donde volaban «sillas, mesas, botellas de vidrio y todo lo que encontraban a su paso».

Asimismo, el empleado de «Concerto» relata que uno de los jóvenes que estaba dentro del local, «con una camiseta verde, de tez morena, pelo corto y tatuaje en el brazo», nada más salir a la calle «sin mediar palabra, cogió una silla de la terraza y golpeó la espalda» de uno de los integrantes del grupo rival.

«Otro hincha, presuntamente de la Jove Elx, calvo y con camiseta blanca, rompió una botella de vidrio para utilizarla como arma blanca» contra los simpatizantes del Hércules.

El gerente del céntrico local de ocio alicantino valora los daños causados durante la reyerta en alrededor de dos mil euros, según una primera estimación, al incluir la rotura de catorce sillas, seis mesas, una luna del establecimiento fracturada, ocho botellas de alcohol rotas y vajilla aún sin determinar.