Cuatro meses acumulan los técnicos del fútbol base del Hércules sin cobrar pese a que los padres pagaron religiosamente lo solicitado por el club para las categorías inferiores. Ese apartado es otro de los puntos caliente a resolver en los próximos días. Como también empieza a haber dudas acerca de la entrada de la empresa de Génova que debe desembolsar dinero a cambio de tener jugadores repartidos por el fútbol base. En ese círculo se temen presiones para alinear en los equipos punteros a futbolistas sin tener en cuenta su aptitud. Mala cosa, pues, que puede volverse en contra también de Ortiz.