Quique Hernández tiene claro el nombre del central con el que quiere reforzar al Hércules en el recién inaugurado mercado de invierno. Se trata del francés Valentin Roberge, futbolista de 26 años que milita en la actualidad en el Sunderland de la Premier League inglesa. El galo, un jugador con una gran planta (1,89 metros), coincidió con el entrenador blanquiazul en el fútbol griego, ya que defendió la camiseta del Aris entre 2008 y 2010.
La intermediación de Quique Pina puede resultar clave para que Roberge aterrice en el Rico Pérez. La llegada de un central de primer nivel daría un salto de calidad al actual Hércules. El principal inconveniente que presenta la plantilla blanquiazul es la falta de efectivos en el eje de la zaga, algo que se aminoraría con el fichaje del francés. Su presencia apuntalaría el juego defensivo del equipo, ayudaría a alejar los puestos de descenso y permitiría, dada la igualdad que reina este año en la Liga Adelante, pelear por la promoción de ascenso.
Roberge cuenta con gran experiencia en el fútbol extranjero. Tras su paso por las canteras del Guingamp y el PSG, lleva desde 2008 jugando fuera de Francia. En su currículo ya se cuentan tres países. Después de defender los colores del Aris en Grecia, militó en las filas del Marítimo de Portugal, club desde el que el pasado verano dio el salto al Sunderland de la Premier League. El conjunto inglés, entrenado por un viejo conocido del fútbol español, el uruguayo Gustavo Poyet, ocupa la última posición en la considerada mejor Liga del mundo.
El nombre de Roberge ya ha sido asociado en ocasiones anteriores con otros equipos españoles, sobre todo con el Deportivo de la Coruña, conjunto en el que estuvo cerca de recalar cuando vestía la camiseta del Marítimo. Ahora puede resultar extraño que el futbolista quiera abandonar la Premier para fichar por un Hércules que en estos momentos no milita en la máxima categoría del fútbol nacional. Ahí es donde entra en juego el trabajo del club blanquiazul, que tiene que convencer al galo de los beneficios de un nuevo cambio de país.
Si este fichaje no se pudiera materializar, en el Rico Pérez hay otros nombres apuntados como alternativas. Uno de los que ha salido publicado en los últimos días es el del también francés Alexandre Coeff. Este central de 21 años y 1,84 metros pertenece en estos momentos a la primera plantilla del Granda y ha sido ofrecido al Hércules. Coeff apenas cuenta para su entrenador, Lucas Alcaraz, que sólo lo ha utilizado en un encuentro en lo que va de temporada. Quique Hernández, por su parte, tiene claro que el primero en su lista es Roberge y sólo se plantearía pensar en otros hombres si no fuera posible que el jugador del Sunderland recalara en Alicante.
Atendiendo a la plantilla del Hércules, resulta evidente que el equipo está obligado a reforzar el eje de su zaga en el mercado. Esta demarcación es la peor cubierta. La configuración del conjunto en verano dejó únicamente a dos centrales puros a las órdenes de Quique Hernández: Noé Pamarot y Borja Gómez. La desgracia se ha cebado con el madrileño y su maltrecha rodilla le ha obligado a perderse todo el curso. Al técnico blanquiazul no le ha quedado más remedio que echar mano del siempre cumplidor Alberto Escassi y del canterano Alberto Carbonell, que ofreció una destacada actuación contra el Alcorcón.
