Fran Mérida y su representante Joseba Díaz llegaron ayer a las oficinas del Rico Pérez a las 17.30 horas y se marcharon casi a las 21.00 con una sonrisa dibujada en el rostro. Habían cumplido su objetivo de rescindir amistosamente su contrato con el Hércules, paso inevitable antes de embarcarse en la aventura brasileña que les ofrecía el Atlético Paranaense.

Fran Mérida ha desembolsado 100.000 euros de su bolsillo para obtener la carta de libertad, ya que el Hércules se negó desde un principio a que se fuera gratis debido a que en el Paranaense cobrará una cantidad cercana a los 400.000 euros. Por este motivo, y teniendo en cuenta que en Alicante percibía 150.000, el club blanquiazul pidió una contraprestación de entre 100.000 y 200.000 euros para abrirle la puerta de salida.

Con la salida de Fran Mérida todas las partes salen ganando, ya que el jugador era consciente de que en el Hércules iba a tener pocas oportunidades ya que no gozaba de la confianza del técnico Quique Hernández. Además, el club se ahorra su ficha y además percibe 100.000 euros por un futbolista con el que apenas contaba. Finalmente el Hércules no percibirá ningún porcentaje de un futuro traspaso del futbolista, ya que Fran Mérida se marcha al Paranaense sólo por una temporada. La competición en Brasil dura 10 meses y si su nuevo club está satisfecho con su rendimiento, le prorrogará su contrato por dos cursos más en unas condiciones económicas aún más ventajosas.

Pitarch acudió a despedirse

El exjugador del Arsenal y del Atlético de Madrid estuvo reunido ayer toda la tarde con el consejero delegado del Hércules Carlos Parodi y con el directivo Vicente Farach. A última hora de la tarde llegó al Rico Pérez el presidente Jesús Garcia Pitarch, quien se despidió personalmente de su fichaje estrella del pasado verano. Ambos abandonaron juntos el estadio pasadas las nueve de la noche y el jugador realizó sus últimas declaraciones como blanquiazul. "Quiero agradecer a toda la gente del club, a la afición y a todo el mundo por mi paso por aquí. Estamos viviendo un año malo pero ojalá que se salve el equipo y en el futuro vaya todo genial", comentó Mérida.

"El arranque no fue bueno pero parece que ahora el equipo empieza a hacerlo mejor y eso es lo que importa", declaró. "En cierto modo estoy triste porque venía para cuatro años, pero también estoy contento por el acuerdo y voy a intentar seguir disfrutando del fútbol en este nuevo reto", continuó el jugador.

Mérida reconoció que se marcha "con una espinita" porque "venía ilusionado por hacer un gran año y no ha salido todo lo bien que yo quería", pero dijo estar "cien por cien" seguro de que el Hércules se va a salvar.

El jugador catalán se despide esta mañana de sus compañeros en Fontcalent y viajará esta semana a Brasil.