Jeffrey Sarpong ha caído de pie en el vestuario del Hércules. El jugador holandés se ha ganado rápido el respeto y la simpatía de sus compañeros por su humildad. También hace gala de una religiosidad muy poco común entre los futbolistas profesionales. Al igual que Kaká y Falcao, el jugador del Hércules profesa la fe evangélica y la tiene muy presente en su día a día.

"Jesús es mi vida, lo más importante para mí y mi mujer. Rezo cada día y leo la Biblia en mi casa", reconoce Sarpong, nacido hace 24 años en Holanda, pero de ascendencia nigeriana.

La Iglesia Evangélica, perteneciente al protestantismo, cuenta en las filas del Hércules con dos fieles, ya que el brasileño Gilvan Gomes también profesa su fe. "Algunos días comentamos pasajes de la Biblia porque tiene las mismas creencias que yo", señala.

La madre de Sarpong y sus hermanos también son evangelistas y considera a la familia otro de los pilares de su vida. "Intento seguir el camino de Jesús. Rezo antes de los partidos, pero no para que Dios me ayude, sino porque es algo que hago todos los días", explica.

Sarpong fue uno de los últimos fichajes realizados por Jesús García Pitarch este verano. La Real Sociedad no contaba con él y al Hércules le ofrecieron sus servicios a un precio muy razonable. Formado en la cantera del Ajax, llegó a disputar 30 encuentros con el equipo holandés, pero su carrera se ha estancado. Por este motivo quiere darle un impulso definitivo en el Hércules.

"Espero dar un salto grande hacia adelante en Alicante. Tengo mucha ilusión en esta etapa de mi vida, estoy con confianza y sé que puedo tener minutos. Me dio mucha rabia lesionarme cuando tenía continuidad", afirma el holandés.

Sarpong está "encantado" con su nueva vida en Alicante y agradece los rayos de sol que no recibía en San Sebastián. "Aquello es muy bonito, pero llovía demasiado para mi gusto. No tengo ninguna mala palabra para la Real, pero ahora siento que puedo ser importante en este Hércules", afirma.

El holandés insiste en que su posición predilecta es la de segundo delantero, aunque parece que este año tendrá pocas oportunidades en esa zona que parece reservada para Fran Mérida. Con Mandiá actuó por ambas bandas y sobresale por su velocidad y técnica. "Siempre he jugado como mediapunta, no me importa hacerlo en la banda para ayudar a mis compañeros, pero me gustaría demostrar de lo que soy capaz por detrás del delantero, como en el Ajax. Estoy seguro de que las victorias no tardarán en llegar", concluye.