7 de septiembre de 1974. El Hércules se enfrentó al Murcia en el primer partido de la Liga. El partido, que acabó con un empate a dos goles, supuso, asimismo, el bautismo del Rico Pérez en competición oficial. En ese encuentro, pues, se anotó el primer gol oficial que registró el actual estadio, con una diana de Jordi Carreño. Corría el minuto 4, Arieta protagoniza una gran jugada por la derecha que acaba en centro al área donde Carreño sólo tuvo que empujar. El tanto desató la alegría del futbolista catalán (imagen de arriba). Aquel encuentro ante el conjunto murciano fue el punto de partida de la brillante etapa del Hércules en Primera División de la mano de Arsenio Iglesias (en la imagen del centro, disponiéndose a sentarse en el banquillo junto a Joseba Betzuen. Detrás de éstos aparecen Quique y Humberto).

Arsenio alineó de salida a: Santoro, José Antonio, Carbonell, Rivera, Pachón, Carreño, Illán, Baena, Arieta, Varela y Pepín (alineación de abajo). En la segunda parte, entraron Betzuen y Andreu. En ese encuentro, Illán falló un penalti que hubiera podido sentenciar a favor del Hércules. Así y todo, el cuadro alicantino se adelantó en dos ocasiones, la primera con el gol de Carreño y una segunda con otro tanto de Arieta, que contrarrestó el empate a un gol anotado por Van Dijk para el Murcia. El jarro de agua fría final llegaría tras un centro del propio Van Dijkm que sería rematado por Vera Palmes colocando el 2-2 definitivo. En la imagen de abajo, en el margen derecho, el equipo salta al campo ante un Rico Pérez prácticamente lleno.