Hoy se cumplen nueve meses de aquel salto fatídico entre Tote y Crusat que destrozó la rodilla del capitán del Hércules. Ese partido liguero frente al Almería sumió al mediapunta madrileño en las tinieblas e incluso pensó en repetidas ocasiones que nunca más volvería a disfrutar del fútbol. Tote se rebeló ante el infortunio y desde entonces ha trabajado como nunca para volver a competir. Juan Carlos Mandiá, técnico del Hércules, tiene previsto convocarle para el choque del domingo frente al Valladolid y el jugador reconoció ayer que, salvo molestias de última hora, el próximo fin de semana volverá a calzarse las botas en el Rico Pérez.

A Tote no le gana nadie ahora a ilusión a sus 33 años. "Tengo mucho fútbol que dar todavía", asegura. "En dos o tres meses he trabajado más que en veinte años, pero era lo que tocaba. Cuando tienes ya esta edad, el cuerpo no responde siempre como quieres y cuesta mucho más. Ahora estoy bien, no tengo molestias y si el sábado sigo con estas sensaciones seguramente entre en la convocatoria", destaca.

El capitán del Hércules tiene un vínculo especial con Mandiá, con quien ya coincidió hace tres temporadas, y ensalza públicamente que el técnico gallego no le haya presionado "lo más mínimo" para que regrese a la competición. "Mandiá se ha portado conmigo de chapó. Le agradezco de corazón que no me haya puesto una fecha, me ha dejado siempre a mi aire y me ha dado total libertad para regresar cuando yo quiera. Hace ya varias semanas que el cuerpo me pedía volver, pero ahora parece la definitiva", valora.

La más que probable reaparición de Tote frente al Valladolid tampoco es casualidad, ya que el mediapunta siempre "un cariño especial" por el conjunto pucelano. "Es un partido especial porque en ese equipo pasé el mejor año de mi carrera. Quiero mucho al Valladolid, pero mis ganas de volver a jugar son tan grandes que estaría igual de ilusionado con otro rival enfrente", admite. El cuadro pucelano, que dirige el exblanquiazul Miroslav Djukic, es uno de los más firmes candidatos al ascenso y Tote está convencido de que "dará mucha guerra" en esta Liga. "Tiene jugadores de mucha calidad y seguro que asciende directamente o juega la promoción", vaticina Tote, quien apenas coincidió en el Hércules con Djukic: "Casi no lo conozco porque yo estaba en Madrid, pero sí me llamó muchas veces para preguntarme cómo iba con mi rodilla. Él no tuvo ninguna culpa del descenso del año pasado y mis compañeros me han hablado muy bien de él".

Tote asegura que se está "dejando el alma" para volver a ser el que era hace nueve meses pero deja claro que aún le queda mucho para adquirir el ritmo de competición de sus compañeros. "Los que van primeros son ellos, yo sólo ayudaré en lo que pueda, como he hecho en los cinco años que llevo aquí. Hay que ser respetuoso con lo que están haciendo estos chicos, que es una maravilla y tiene mucho mérito", defiende.

El capitán del Hércules reconoce que durante las vacaciones de Navidad deberá recuperar el tiempo perdido y aprovechar el descanso del resto de compañeros para ponerse al mismo nivel que ellos. "Está claro que no puedo parar en Navidad, entrenaré en Madrid por mi cuenta con el plan que me preparen. Todavía que me queda bastante para estar igual que mis compañeros y mi objetivo ahora es jugar de la mejor manera los cinco o diez minutos que tenga ante el Valladolid", señala.

"Muy agradecido"

Paco Peña, que comparte capitanía con Tote, aseguró la semana pasada que el mediapunta y Aganzo eran los mejores fichajes de invierno que podía hacer el Hércules y el madrileño se muestra "muy agradecido" por las numerosas muestras de cariño recibidas en el vestuario. "Las palabras de Paco son bonitas y en lo que se refieren a Aganzo tienen mucha razón porque es un delantero espectacular que nos tiene que dar muchísimo. Conmigo hay que tener más tranquilidad porque llevo mucho tiempo parado (nueve meses)", advierte.

Tote, por último, ha ensalzado el gran rendimiento ofrecido por el Hércules en estas primera dieciséis jornada y se muestra sorprendido por que se haya cuestionado el escaso bagaje ofensivo del equipo blanquiazul, sobre todo, tras encadenar tres derrotas en cuatro partidos. "Si vamos primeros y la gente empieza a ponerle peros al equipo, no sé cómo estarán los terceros o los décimos. Debemos tener memoria y ver que en la primera jornada sólo había 14 profesionales y el resto eran canteranos. Hay muchos futbolistas nuevos y es muy difícil hacer lo que está haciendo el equipo. Hay que querer más al Hércules, ser sensatos y valorar la cantidad de puntos que se están sumando", defiende Tote.