La caída en barrena del Hércules en la segunda vuelta del campeonato es de tal calibre que empeora las cifras del anterior descenso a Segunda División consumado en la temporada 96-97. Una vez disputada el pasado fin de semana la jornada 37ª, el conjunto blanquiazul suma 34 puntos, uno menos que hace 14 años a las misas alturas de la Liga que entonces disputaban 22 equipos, dos más que en la actualidad. El cuadro que ahora entrena Miroslav Djukic acabará penúltimo con anterior seguridad y el que entonces preparaba Quique Hernández estaba una posición más arriba en la tabla y a cinco puntos de la salvación. Las similitudes entre ambas trayectorias acabaron por aproximarse, hasta el punto de que aquel equipo presidido por Aniceto Benito finalizó la temporada penúltimo -igual que el actual- y a siete puntos de la salvación, una cifra que bien puede igualar el cuadro de Djukic si vence este sábado (20.00) en el Rico Pérez al Sporting en la última e intrascendente jornada.

El pasado siempre vuelve en este Hércules, que muy poco aprendió de su anterior e igualmente efímero paso por Primera, en el que la planificación fue un desastre y el rendimiento de la plantilla estuvo por debajo del nivel exigible para la categoría desde el comienzo de la temporada. Quizás sea ésta la diferencia esencial con el Hércules actual, cuyo desplome se ha cimentado en la segunda vuelta después de un primer tramo del campeonato más que aceptable, en el que el equipo entonces entrenado por Esteban Vigo fue el duodécimo en una clasificación parcial de los 19 primeros partidos de la Liga. Sin embargo, el técnico malagueño perdió por completo el control del equipo, que tras siete partidos con Djukic en el banquillo se mantiene como el peor de la segunda vuelta con sólo 12 puntos de los 54 disputados, 10 menos que en la primera vuelta a falta de un solo partido para el final de la Liga.

Además del hundimiento en la segunda vuelta, el descenso del Hércules se fragua en su condición de peor equipo visitante de la categoría con apenas nueve puntos de los 57 disputados, uno menos que la Real Sociedad y dos por debajo del Osasuna y del también descendido Almería. Los alicantinos sólo han ganado en el Camp Nou y en Anoeta y son, junto a Zaragoza y Sporting, los que menos victorias suman lejos de casa. También son, junto a la Real, los que más derrotas han cosechado: 21 en total. Con todo, el Hércules comenzó a perder pie en Primera cuando dejó de ganar en el Rico Pérez a los rivales directos: Almería, Osasuna y Racing. De hecho, en la clasificación de puntos sumados en casa, los blanquiazules, con 25, son los terceros por la cola.