Un día después de caerse de la convocatoria para el crucial encuentro en Málaga, Drenthe y Trezeguet acudieron ayer a la sesión de trabajo y recuperación, organizada por el cuerpo técnico del Hércules en el gimnasio Hurban Sport, ubicado en el Centro Comercial de San Vicente. El holandés y el francés, junto a Cristian y Momo Sarr, estaban citados a las 10 horas en el centro deportivo para ejercitarse en la piscina. Excepto el internacional galo, el resto de futbolistas acudieron con extremada puntualidad a la convocatoria. Trezeguet, sin embargo, hizo acto de presencia cuarenta minutos después, a las 10.40 horas, y se convirtió en la diana de las críticas de un grupo reducido de aficionados del conjunto blanquiazul. Los seguidores le increparon por su falta de compromiso con el equipo y le acusaron de solo pensar en cobrar las nóminas al final de mes. "Tienes un año más de contrato. Ya jugaste en Segunda con la Juventus de Turín y ahora te va a tocar hacerlo con el Hércules", le espetó un joven simpatizante, mientras otro le reprendió: "¡Qué cara tienes!". El francés, muy altivo en su gesto y con una concisa frase, se limitó, con ironía, a dar veracidad a las recriminaciones de los aficionados: "Tenéis razónÉ". La entidad, ante el retraso del francés, ha de tomar una decisión y determinar si sanciona al delantero internacional. La multa, de ser aplicada, podría oscilar entre los 1.000 y los 3.000 euros, según recoge el reglamento de régimen interno.

A su llegada al centro deportivo, ni Drenthe, que apareció refugiado en una amplia sudadera con capucha, ni Trezeguet realizaron declaraciones. Por el contrario, a la salida, ambos atendieron a las cámaras de Canal 9, que aguardaban su marcha. En primer lugar, el holandés, quien rehusó dar explicaciones ante las explicaciones del periodista. "No tengo nada que decir", apuntó el extremo. Media hora después, el francés también abandonó las instalaciones y pospuso sus explicaciones a los próximos días. "Esta semana haremos una conferencia de prensa, como se debe, para aclarar toda la situación", puntualizó el francés. El máximo goleador del equipo, que suma once tantos, alegó el pasado sábado unas molestias musculares en el abductor para esquivar el viaje a la capital de la Costa del Sol.

Por su parte, el holandés esgrimió el mismo día unos repentinos dolores en la rodilla para no pisar La Rosaleda. El jefe de los servicios médicos del Hércules, Jeroni Llorca, sin embargo, reconoció, instantes después de que ambos se cayeran de la lista de convocados, que "las pruebas a las que se les han sometido no revelan ninguna lesión". Así, al término del último entrenamiento de la semana, previo al trascendental encuentro ante el Málaga, el malestar en el seno de la plantilla se acrecentó por las inexplicables bajas de Drenthe y Trezeguet, dos jugadores llamados a marcar sobre el campo las diferencias. Además, ninguno de los dos tomó el ejemplo de Farinós, quien a pesar de arrastrar una sobrecarga en el sóleo se desplazó junto al resto de la plantilla hasta Málaga. También Velthuizen presenció el encuentro, aunque lo hizo desde la grada. El portero holandés, con molestias en una mano, dejó su hueco en el banquillo a Unai Alba.

Tras la derrota en La Rosaleda, el equipo regresará mañana a los entrenamientos, tras disfrutar de una jornada de descanso.