"No hay una decisión tomada, pero está más cerca que lejos", singificaba ayer una fuente próxima a Miguel Campoy, presidente de la Autoridad Portuaria y persona elegida para ocupar la presidencia de la Fundación Hércules. El político se reunió ayer con Enrique Ortiz en las oficinas del Rico Pérez, pero declinó pronuciarse sobre si acepta o no su nuevo cargo al término del encuentro con el empresario. Campoy está a la espera del informe jurídico que debe aclarar si existe o no incompatibilidad alguna para ocupar la presidencia de la Fundación y su actual cargo al frente de la Autoridad Portuaria. En principio, al ser la Fundación una institución sin ánimo de lucro y con fines benéficos, todo apunta a que Campoy no encontrará obstáculo alguno para desempeñar ambas funciones. Sea como fuere, en tanto no haya un dictamen jurídico aclarando la situación no habrá traspaso de poderes.

Como máximo responsable de la Fundación Hércules, Campoy se convertirá en presidente del órgano que controlará accionialmente el club. Una vez concluida la ampliación de capital, la Fundación ostentará el ochenta por cien de las acciones como consecuencia del nuevo reparto servido por los 18 millones de euros que llegaron con un crédito de la CAM y avalados por el Instituto Valenciano de Finanzas (IVAF).

La decisión no se demorará mucho, dado que el próximo martes día 23 está prevista la asamblea que debe elegir al presidente y a los nuevos patronos.

Sobre este último apartado han ido circulando diversos nombres en los últimos tiempos atendiendo a quien ocupara la presidencia. Así, con Antonio Fernández Valenzuela, primer candidato barajado para acceder a la poltrona de la Fundación, la nómina de patronos iba a sufrir una alteración significativa. El ex presidente de la Cámara de Comercio y de la Diputación exigió autononía plena, al tiempo que dejó claro en las conversaciones previas que varias de las personas de confianza de Enrique Ortiz no continuarían en las oficinas si finalmente daba el paso definitivo. Todos los puntos solicitados por Valenzuela obtuvieron un "sí" por respuesta.

Ahora está por ver qué condiciones ha esgrimido Miguel Campoy para pilotar el barco de la Fundación, si seguirá contando con el actual equipo que gestiona la entidad o si, por el contrario, incorpora a personal de su confianza para acompañarle en su nueva aventura. El martes, a más tardar, habrá respuestas a tanto interrogante.