Mientras media España disfruta de sus días de asueto, en la calle Foguerer Romeu Zarandieta no hay tregua. Ni en las oficinas del Rico Pérez, ni en el vetusto estadio, sometido a una profunda remodelación que le debe permitir competir en igualdad de condiciones con las instalaciones de otros equipos.
El lavado de cara del estadio comenzó el pasado mes de enero con la impermeabilización de algunas gradas en las que las goteras eran clamorosas. Una vez finalizada la competición, los operarios han puesto un ritmo frenético que permite al gerente Carlos Parodi ser optimista respecto al cumplimiento de los plazos previstos. La intención del Hércules es que el Rico Pérez presente un aspecto más saludable y moderno de cara al inicio de Liga, previsto para finales de agosto.
La reforma contempla desde el levantamiento del terreno de juego, hasta la sustitución de todos los sanitarios de los aseos, pasando por el asfaltado del aparcamiento y la impermeabilización de todas las gradas. Además, la Liga de Fútbol Profesional obliga a los clubes a numerar las localidades de todas las zonas.
El estado del césped se convirtió en una obsesión para el técnico Esteban Vigo durante la temporada pasada. El entrenador malagueño incluso llegó a dudar de que los operarios realizaran todo lo que estaba en su mano para adecentar un terreno de juego que en los últimos años ha dado más de un quebradero de cabeza. Para evitar más problemas, el consejo de administración decidió contratar los servicios de una empresa catalana que supervisa los estadios del Barcelona, Almería, Espanyol y Villarreal, entre otros equipos de Primera. Así, ha "levantado" el terreno de juego y ubicado nuevas canalizaciones de riego, con 20 puntos de aspersión. A principios de la semana que viene se pondrán los tepes o tiras de césped enrrolladas.
Aparcamiento asfaltado
El improvisado y caótico aparcamiento de tierra ubicado en el Fondo Norte ya es historia. El club allanará la zona y la asfaltará, por lo que los abonados VIP, los jugadores, sus familiares y los dirigentes podrán hacer uso de esta instalación.
El proyecto de reforma también contempla el derribo del cerramiento de la entrada principal, en desuso desde hace varios años, y por donde accederán al estadio los abonados VIP y los dirigentes.
El vestuario local y el visitante también están sufriendo una severa remodelación para poder acomodar a los jugadores más cotizados del mundo, al tiempo que los banquillos se elevarán para que los técnicos puedan tener una visión más completa del terreno de juego.
Por último, el Hércules abrirá por fin su tienda, que estará ubicada en las antiguas oficinas del Alicante, situadas también en las instalaciones del Rico Pérez.
