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El hasta hoy presidente de la Fundación Hércules, Rafael Gregori, ha renunciado esta tarde a todos sus cargos en esta entidad, tras mantener una conversación con los responsables de Aligestión, máximo accionista del Hércules, y con el presidente de la Diputación y patrono de la Fundación, José Joaquín Ripoll.
A través de un comunicado, Gregori, que la pasada semana fue detenido en relación a un asunto mercantil, ha explicado que "en ningún caso" quiere que "un asunto que sólo afecta a su actividad profesional privada pueda enturbiar la imagen del Hércules y de su Fundación".
En este sentido, Gregori ha manifestado estar "absolutamente tranquilo" ante "un pleito" que considera "exclusivamente mercantil y, por tanto, sin ninguna responsabilidad penal".
Asimismo, ha expresado su vocación de "cariño y colaboración" con el Hércules.
De hecho, ha trasladado su deseo de que, una vez "las cuestiones mercantiles" estén "solucionadas", estar "nuevamente a disposición del Hércules y de su Junta Directiva".
Además, Gregori ha agradecido, a través del citado comunicado, las muestras de apoyo y colaboración que ha recibido de la sociedad alicantina y "el trato exquisito que tanto el Hércules como su Fundación han tenido" con él.
Finalmente, ha mostrado su deseo de que el club consiga este año "el ascenso a Primera que tanto merece".
