Con el arranque del nuevo año y tras el final de las celebraciones navideñas llega la temida cuesta de enero. Los gastos en regalos, comidas, cenas y demás celebraciones hacen que muchos españoles tengan problemas de liquidez y, por ello, cada vez son más los que aprovechan el primer mes del año para revisar su situación económica y definir así qué gastos podrán suprimirse y qué capacidad de ahorro se tendrá.

Tal y como indica el portal especializado tucasa.com, una de las opciones para reducir gastos es intentar renegociar las condiciones de tu hipoteca con el fin de lograr una mejora que nos permita pagar menos cuota mensual.

¿Novación o subrogación?

La primera posibilidad y la más sencilla es la novación, que consiste en negociar una mejora de condiciones directamente con el banco donde hemos contratado el crédito hipotecario. Así, podemos intentar lograr un tipo de interés más favorable, revisar el plazo de amortización o solicitar una ampliación de la hipoteca. Cabe destacar además, que los gastos asociados a una novación no son muy altos.

La subrogación, por su parte, consiste en cambiar la hipoteca a otra entidad. Para hacerlo, no es necesario el consentimiento del banco, ni tener ninguna cláusula especial en nuestro contrato. Esta opción es la más utilizada entre aquellos que contrataron su hipoteca cuando los tipos de interés, como el Euríbor, estaban en máximos. Los gastos asociados a la subrogación son muy superiores a los de la novación, por lo que, según tucasa.com, es recomendable calcular la cuota de la nueva hipoteca para saber en cuántos meses se habrá amortizado la operación antes de tomar la decisión.

Claves a tener en cuenta

Tanto a la hora de pedir una hipoteca, como a la hora de iniciar una negociación de mejoras con la entidad bancaria, es imprescindible que sepamos qué son y qué conllevan todas las cláusulas, comisiones y condiciones de la misma, ya que es precisamente el desconocimiento el que en muchas ocasiones nos lleva a pagar más de lo que deberíamos. El conocer todas las condiciones del contrato nos permite evitar cláusulas abusivas.

También es recomendable analizar las ofertas de diferentes entidades y hacer una propuesta de máximos (tipos bajos, eliminación de condiciones,…). Esto nos dará una posición ventajosa en la negociación ya que ante la posibilidad de perder un cliente, la entidad puede hacernos una contraoferta que mejore sustancialmente la inicial.