Ese momento en el que la vida comienza la mañana del viernes es lo que mi hermano llamaría el «momentazo Nescafé» o lo que viene a ser lo mismo, ese increíble instante en el que, abriendo los ojos, la conciencia te determina que ya, por fin, si? es viernes, y la cosa comienza a notarse como más llevadera, más liviana, mas de finde, vaya? y no digo nada de cómo se transforma ya en increíblemente fabulosa cuando la hora feliz llega al reloj de los currantes. Estamos todos con el horizonte pendiente de esa tarde de viernes en la que, si hay suerte, puedes comenzar el weekend sin más demora. La verdad es que algunos a quienes nos gusta currar, incluso mucho, rezamos para poder pasar este Rubicón con cierta destreza y luego, tras mucho esfuerzo, sobrevivir al Saturday Night, si lo hubiese, o la «acampada familiar» de turno que suele instalarse en tu sofá. Así que os propongo un finde movidito y con cuatro cosas muy sencillas pero también, creo, imprescindibles. Mientras en la Marina discurre la Purísima Xiqueta de Benissa, en Elche me anticipan el viernes el Festival de los Muertos, un pedazo de evento que mezcla música, teatro, circo, performance y un toque de acracia artística muy especial en directo. En Elche puedes disfrutar toda la tarde de hoy como un conejo de chistera de Alicia in Wonderland, que es, básicamente como mejor se vive, y maquillarte, oír en directo «musicón», bailar, disfrazarte entre los muertos cadavéricos del sitio o sencillamente echar una buena tarde como procede entre musicas. Este mismo viernes en Alcoy empiezan los preparativos de unos Moros y Cristianos hartos de quemar pelaje entre las batallas por defensa de sus «festes» y donde podrás ver y disfrutar no solo de pólvora, entradas, el Circulo o el Casino, y la ciudad entera transformada en un Castillo rodeado por las «filaes» de unos y otros, bandas de música o la mejor escenografía que recuerdes en unos Moros, sino que bailarás entre la gente hasta el mismo domingo con la Entrada Mora al compás de marchas moras increíbles. Mientras el fin de semana, que va de muertos al parecer, se corona con El Funeral de Concha Velasco y Antonio Resines en el Teatro Principal de Alicante. Vestuario del creador Ion Fiz y texto de Manuel Velasco para una obra genial, de humor negro y tragicómica como los mejores tiempos de las divas de los cincuenta: diálogos de finura y gracejo, como decían los Miura, para sonreír con buen sarcasmo a la vida misma. Concha esta que se sale entre los turbantes de costura y la escena general para volver a embargarnos el corazón con su magia y gracia clásicas. Y, si no tienes suficiente, el calendario de eventos de unos parajes únicos como los interiores de cuevas (la del Rull o las de Canelobre) albergan ahora más que nunca espectáculos y mucha magia. La provincia amanece cada domingo con una suerte de sol que riega entre olor de azahar de naranjo, campos, playas y ciudades para recordarnos que cada minuto es un regalo de la vida en nuestras manos. Feliz Finde y, por cierto, con el toque dulzón de un buen pastel de El Túnel ( que rico) de Alcoy anticipando los bombones Torreblanca de Elda que en breve también tocará retreta mora.