Su protagonista, la alemana Diane Kruge, obtuvo el premio a la mejor interpretación femenina en Cannes y mereció el Globo de Oro a la mejor cinta en lengua extranjera y es un nuevo y elogiado largometraje del turco afincado en Alemania Fatih Ahkin ( Corto y con filo, Al otro lado, El padre y Goodbye Berlín). Catalogada como un thriller, la película está asociada a la figura de Katja, cuya vida se derrumba cuando su marido y su hijo mueren en un atentado. La policía detiene enseguida a unos sospechosos -dos jóvenes neonazis-y Katja se ve inmersa en un complicado proceso judicial. Danilo, abogado y mejor amigo de su marido, lleva el caso y hará todo lo posible para dar el apoyo necesario a Katja, quien cegada por el dolor, solo tiene un objetivo: por encima de todo, quiere que se haga justicia.

Ahkin dijo que todo empezó con los asesinatos del NSU en 2011. «El grupo neonazi alemán Clandestinidad Nacionalsocialista perpetró una serie de asesinatos xenófobos entre 2000 y 2007. Fue algo muy impactante para mí porque soy de origen turco. Pero lo más escandaloso es el hecho de que la policía centró sus investigaciones en la comunidad de las víctimas, y atribuyó los atentados a venganzas por asuntos de drogas o de juego».