Si hay un estilo que triunfa sobre todos los demás es el estilo parisino, no se como lo hacen estas chicas para ir absolutamente perfectas y encantadoras a la vez que parece que no han dedicado ni un minuto en pensar lo que se ponen cada mañana, y es ese je ne sais quoi lo que nos lleva de cabeza al resto de población femenina.

Pero que no nos lleven a equívoco, este estilo tiene unas claves totalmente identificables, y que podemos seguir a rajatabla para ser de vez en cuando unas auténticas french girls.

Y puestas a entrar en materia ¿qué secretos esconde en el armario una parisina? O lo que es más importante ¿qué prendas básicas son las que conforman su tan deseado estilo?

Pues bien, una chica parisina siempre tiene en el armario una buena blazer que combinara con jeans de talle alto, y nunca con sneaker, lo calzara en este caso con unas sandalias de tacón o salón de «tacón sensato» y a poder ser bicolor, el clásico en color crema con puntera oscura muy Chanel, como no podía ser de otra manera.

Sus estampados favoritos son, por su puesto, las sempiternas rayas marineras, ideales para lucir con una gorra navy y así llevar el estilo al extremo acompañados de su icónico bolso-cesta de mimbre. Otro de los prints que encontramos en el catálogo de una buena parisina es el de leopardo, que sin abusar, usara eso si, en pequeñas dosis y en contadas ocasiones.

Las biker o cazadores de cuero es otra de los recursos estilísticos de nuestras chicas favoritas, que llevara con vestidos largos de noche, o en looks total black con pantalones masculinos pero siempre con unos marcados y seductores labios rojos.

En cuanto al tejido predilecto, el tweed es de uso obligado, sí, aquel que incluyo con mucho acierto Coco Chanel en el vestuario femenino haya por el año 1954, perfecto para lucir en chaquetas y faldas pero nunca, nunca, en conjuntos completos.

Y como complemento, el pañuelo de seda al cuello, de esos de aire retro y preferiblemente heredado de la abuela, son prefectos sobre jerséis finos, o para rematar elegantemente tops con escotes pronunciados, que junto con la boina, hacen un mix perfecto.

Y así podríamos seguir desgranado recursos estilísticos, como el smoking con sneakers, las faldas lápiz con bailarinas, los vestidos de gasa con botas moteras? Pero eso ya lo dejamos para otro capítulo ¡Au revoir amis!