Como reza el refrán, y máxime en esta tierra donde (entre otros) los zapatos son un emblema de nuestra historia; pues como dice bien el dicho, es recomendable que el verano empiece por los pies. A treinta grados a la sombra, una humedad que desbanca hasta a la mejor de las intenciones por hacer cientos de cosas a la vez y la tensión por el subsuelo, mis zapatos son mi bastión inexpugnable. Como le pasa a la insigne María Teresa Campos, a la eterna reina del posado veraniego, doña Ana Obregón, o a hombres cuidadosos como Jesús Vázquez, mis pies los cuido cada vez más con dos cosas: el descubrimiento de las nuevas pedicuras de mis «chinas» favoritas Yi Du o el lujurioso y fantástico Bambú (centro cool y relajante donde los haya) y el cuidado y mimo de mis chicos favoritos: el viejo zapatero. He descubierto porqué todo Telecinco anda como pisando por las nubes? sí, sí! Se lo deben a un inventillo que les quiero compartir: la barra metatarsiana, una suerte de plantillas anatómicas y trabajo en un zapato que te hace parecer Keanu Reeves caminando por las susodichos «cúmulos de vapor de agua» que tanto nos han hecho soñar sobre el cielo. Subida sobre ellas, me pienso dar una vuelta, en profundidad por las aguas, la bahía, el casco histórico y las calas de la preciosa Calp, en fiestas estos días. Recomendable al máximo el Hotel AR Diamante Beach & SPA, al que puedes llegar con un cochazo de los que Alfredo, muy cerca, en Egocars (Gandía) encarga para los caprichosos de descapotables históricos a los James Bond. Y con ese glamur, directa a un restaurante que juega con la magia de Desayuno con Diamantes, el Audrey's by Rafa Soler. Este verano las estrellas son dos, las burbujas mágicas del Premiere Bulle Rose y la ginebra Gintleman Black, ésta última la rutilante nueva estrella de unas destilerías ilicitanas maravillosas como SYS, una gozada para los sentidos. Alternativamente, os recomiendo en la villa calpina también El Bodegón y Abiss, interpretaciones contemporáneas y exquisitas de la cocina tradicional de nuestra tierra. La Virgen de las Nieves «rivaliza» éste sábado con la patrona de Alicante. La Virgen del Remedio desde 1648 sale a la calle acompañada de todos los alicantinos para celebrar que la ciudad se libró del cólera y volvió a renacer de sus cenizas. Es una procesión única que no os podéis perder, con pétalos de rosa que le lanzan desde los balcones y una banda de música inconfundible que, desde que tengo uso de razón, me ha levantado el alma cada verano. Antes la playa del Cocó verá hoy mismo viernes, el famoso Desembarco, una tradición de Moros y Cristianos, de reciente recuperación en la ciudad, que desde 1700 también rememora la reconquista de nuestras tierras; barcos, moros, piratas, cristianos, fuegos artificiales y arcabucería únicos en la noche. Y para continuar, podríamos cruzar y subir por ese ascensor único hasta el centro de un castillo que dibuja la cara del Moro, el Castillo de Santa Bárbara donde las veladas tienen actuaciones como L.A. esta noche o más adelante Javier Robles en el ciclo Live the Roof. Este sábado, el interior reclama su sitio: Bustamante hará desmayarse a las huestes de fans adolescentes y «señoras bien» en El Pinos y en La Vila el espectáculo de danza, teatro y performance Mülier se revela como una verdadera joya plástica. Y para finalizar un finde más, colgando el cartel de lleno, un buen desayuno el domingo bien prontito y a Alcoy, donde las nuevas visitas a las pinturas rupestres a la Cueva de la Sarga, son un regalo de la historia; después, si apetece continuar, una buena mesa en el restaurante La Vil·leta del Hotel Vila de Muro donde siempre puedes hacerte un buen masaje, disfrutar de la siesta en el SPA y si tercia, hasta quedarte a dormir muy a gusto mirando a la sierra al fresquito. Happy weekend.
