El niño portugués que se hizo famoso en la final de la Eurocopa de este domingo en París por acercarse a un seguidor francés para consolarle por la derrota por 1-0 de su selección confesó hoy que le dijo que solo era un partido y que un segundo puesto "no está mal".

"No es más que un partido, aunque entiendo cómo te sientes", le dijo Mathis, de 10 años, en un breve intercambio recogido por medios de todo el mundo.

El pequeño señaló hoy en la cadena francesa "BFM TV" que se acercó a ese chico porque le dio pena verle en ese estado.

"No me gusta ver llorar a la gente, aunque no la conozca", explicó sobre un gesto por el que tanto él como sus padres han recibido numerosas felicitaciones.

Las imágenes difundidas por los medios y que se han convertido en un fenómeno viral muestran cómo tras la derrota el niño portugués se acerca al francés mientras éste está llorando. El otro, sorprendido, acaba despidiéndole con un abrazo.

El pequeño, vestido con la camiseta de la Seleçao, se asegura después de que el francés se ha ido y no puede verle para volver a desplegar su bandera y ondearla celebrando la victoria de su equipo.