La sede universitaria de la Marina, en Benissa, acogió el jueves el acto de entrega de uno de los máximos galardones de la Universidad de Alicante al periodista y escritor benissero Bernat Capó, el Laurel de Oro. Esta distinción por parte de la UA se entrega a personas o entidades de prestigio internacional en el campo de las ciencias, la investigación, la docencia, la creación artística, el deporte o la solidaridad.
En esta ocasión, y de boca del Rector de la Universidad de Alicante, se le ha entrado este galardón a Bernat Capó por su «trayectoria profesional y cívica, absolutamente admirable y el excelente prestigio en el campo de las letras y el valor de la solidaridad, con una vida consagrada al periodismo en diferentes medios de comunicación y a la creación literaria, con una obra absolutamente valiosa y singular en su contexto. Sin olvidar su figura como referente cívico de primerísimo orden en el proceso de reconstrucción lingüística y cultural que la sociedad valenciana ha protagonizado en el último medio siglo».
Laureles de oro en el deporte
Capó no es el primero ni será el último en recibir este preciado reconocimiento. La Universidad de Alicante desde su creación ha ido entregando Laureles de Oro a diferentes personajes y entidades y por diferentes motivos.
En 1994 el primer Laurel de Oro Deportivo se lo entregaron a Arantxa Sánchez Vicario. Como comentaba en aquel entonces Andrés Pedreño «el Laurel de Oro nace con vocación de premiar esfuerzos constantes y excepcionales por mejorar, que se plasma en el dominio brillante de la técnica y en el logro de sabiduría, y nadie mejor que Arantxa para merecer este primer galardón, ya que en su trayectoria se ven reflejados muchos de los valores que comparte esta Universidad».
Otro Laurel de Oro Deportivo entregó la Universidad en el año 1996, en este caso a Juan Escarré Ureña que, por entonces, era alumno de Magisterio de Educación Física. En aquel año participó en los Juegos Olímpicos de Atlanta y logró la medalla de plata. Tras este premio, fue premio al Mejor Deportista de la Provincia de Alicante por la diputación Provincial, en los años 1996 y 1999. Actualmente es diplomado y trabaja como técnico del Servicio de Deportes de la UA.
En 2014, el alicantino Pedro Ferrándiz González recibió el Laurel de Oro en la clausura del curso 2013/2014. Se lo entregaron «por su trayectoria profesional como entrenador de baloncesto». Fue entrenador del Real Madrid (1959-1975) donde ganó 12 Ligas españolas, 11 Copas de España y 4 Copas de Europa, lo que le acredita como uno de los mejores entrenadores europeos de baloncesto de todos los tiempos.
Laureles de oro en las artes
Pablo Milanés ha recibido este reconocimiento en dos ocasiones, primero en 1996 como Laurel de Oro Cultural. Y en 2002 por cumplir el perfil solidario y de trabajo continuo concretados en una persona que debe «servir de ejemplo a los universitarios y a las universitarias». El rector Salvador Ordóñez resaltó los valores de compromiso de Milanés con su pueblo y con la humanidad, de invitación a la unidad sudamericana y de castigo al alma burguesa.
La soprano eldense, Ana Mª Sánchez recogió el 5 de abril del año 2000 el Laurel de Oro al Mérito Artístico de la Universidad de Alicante. Todo un reconocimiento a una carrera, a unos valores profesionales y humanos que la Universidad quiso destacar incorporando al acervo académico a esta personalidad, una de las más importantes voces de la lírica española que alcanza un gran reconocimiento en los principales centros operísticos del mundo. Ana Mª Sánchez tiene buena relación con la UA ya que es licenciada en Filosofía y Letras por la Universidad, además, la primera promoción.
Este mes de enero de 2017 la Universidad de Alicante entregó, a título póstumo, el Laurel de Oro, al artista ilicitano Sixto Marco en un acto que celebraron en el MUA. «Un reconocimiento que esta universidad le debía y que a punto estuvo de recibir, pero su fallecimiento lo frenó», explicaba el rector, Manuel Palomar, en su intervención. «Nuestro deber es reconocer el legado de nuestros poetas, nuestros pintores. Nuestra sociedad necesita de los pintores para entender el mundo que nos rodea, para entender dónde estamos y dónde vamos y Sixto Marco ha contribuido de manera notable a ello», añadía el rector.
Laureles de oro a letras y números
De igual modo, Capó no ha sido el primer escritor en recoger un Laurel de Oro. Ya lo hizo en 2004 Manuel Delibes, aunque no se celebró ningún acto institucional, la universidad quiso reconocer su trayectoria literaria.
Germán Bernácer también recibió el Laurel de Oroa título póstumo con motivo del 50 aniversario de su fallecimiento en 2015. «Si hay un ámbito del intelectual que nos interesa es su compromiso en la promoción del conocimiento. Compartía con una institución como la nuestra el sentido crítico de la sociedad y la formación de ésta. Desde su experiencia docente, se preocupó por la enseñanza de las materias científicas y las prácticas en el laboratorio de su alumnado. Él mismo había sido alumno de aquella Escuela Superior de Comercio en el actual edificio de La Asegurada y, con posterioridad, en éste mismo», comentaba en el acto de entrega de su Laurel de Oro, el rector Manuel Palomar.
Y a título póstumo, y también en el año 2015, la Universidad e Alicante entregó el Laurel de Oro, en un acto en Alcoy a Ricardo Senabre Sempere. En su momento el rector, Palomar reconoció «la altura académica» del homenajeado evidenciada por las muchas distinciones que recibió a lo largo de su trayectoria, «como la Encomienda de Alfonso X el sabio o el Premio a la Excelencia Científica de la Universidad de Salamanca».
Sin duda, grandes nombres que han marcado la historia de España en sus ámbitos de trabajo y de expresión, y por ello, la Universidad no dejará de entregar este galardón, a quiénes reúnan los criterios que les hagan merecedores de un Laurel de Oro.
