ace aproximadamente unos seis años se acercaron al Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) dos ingenieros que entraron en mi despacho, con un power point y muchas ilusiones. Raúl Torres y Raúl Verdú o Raúl Verdú y Raúl Torres, en resumen «los raúles»: dos «chavales» que «solo» querían un millón de euros para desarrollar un cohete propulsado con motores de combustible líquido, con estructuras reutilizables basadas en procesos de otras industrias como la industria agroalimentaria,náutica y electrónica de vuelo de uso comercial e industrial.

Como se imaginarán, mi primer impulso fue salir corriendo. Pero la pasión que transmitían, el brillo en sus ojos, lo claro que lo tenían, el que no admiten un no o simplemente el destino, hizo que me quedase sentada, que siguieran contándome su sueño y que me enamorase de ellos y de su proyecto? Y lo digo como lo siento: primero, de ellos, de su calidad humana, de su humildad, de su capacidad de sacrificio, de su tesón, de su fuerza y luego de su proyecto.

Al parecer, no solo me pasó a mí. En 2014 la asociación estadounidense Kairos Society incluyó a Raúl Torres y Raúl Verdú, cofundadores de PLD Space, en la lista de los 100 emprendedores menores de 30 años más influyentes para el futuro.

Hoy, al escribir estas líneas, puedo decir con orgullo que PLD Space es una start up tecnológica española del sector aeroespacial promovida por estos dos ingenieros que ya dan trabajo a unos 20 ingenieros más. Esta empresa, cuya ingeniería sigue instalada en el Parque Científico de la Universidad Miguel Hernández de Elche, cuenta con un banco de ensayos para motores cohete de combustible líquido en el aeropuerto de Teruel. PLD Space tiene como objetivo lanzar el primer cohete reutilizable de Europa, lo que permitirá reducir el coste de acceso científico y comercial al espacio.

PLD Space ha logrado grandes importantes hitos estos últimos años. En junio de 2015 la start up realizó con éxito la primera prueba de un motor cohete de combustible líquido 100% desarrollado y fabricado en España. Desde entonces han realizado más de 30 ensayos de este demostrador tecnológico a escala real. Esto ha hecho que PLD Space firmase en 2015 un contrato con la Comisión Europea para realizar ensayos de motores cohete experimentales de combustible líquido para el Centro Aeroespacial Alemán.

En 2016 consiguió cerrar una ronda de financiación de 6,7 millones de euros con el apoyo de empresas privadas como la multinacional tecnológica GMV, así como un grupo de empresarios ilicitanos y valencianos, y con instituciones como la Agencia Espacial Europea (ESA), el CDTI, ENISA o SUMA Teruel, entre otras.

Estos logros le han valido a PLD Space varios reconocimientos. Entre ellos, ser considerada por la plataforma StartupXplore una de las start up españolas que más darán que hablar en 2017. Además, la Asociación Española de Científicos reconoció a la empresa con una Placa de Honor por su trabajo innovador y pionero.

Pero a mí, lo que más me gusta reseñar de PLD Space sigue siendo la pasión que destila el equipo por todos sus poros. Espero, estoy segura, de que en dos años, podremos escribir que PLD Space ha sido la primera empresa española que ha lanzado desde el Arenosillo (Huelva) el primer cohete de 14 metros con cargas de pago de hasta 150 kg, el ARION1.