Suma Gestión Tributaria estima en más de un millón de euros el ahorro para los ayuntamientos de la provincia que tienen delegada la gestión y recaudación de sus tributos a lo largo de este 2018.

Este ahorro será posible gracias a las medidas de eficiencia e innovación en la gestión del organismo de la Diputación. Estas medidas han permitido rebajar los costes para los ayuntamientos. Además en 2018 pagarán los intereses más bajos de la historia por los adelantos que perciban a cuenta de la recaudación voluntaria de sus impuestos y que les permite garantizar su liquidez.

Reducción de costes

En este 2018 ha entrado en vigor la bajada de la tasa de gestión que el Pleno de la Diputación aprobó en noviembre de 2017 y que representa un ahorro directo para los 139 ayuntamientos que tienen delegada en Suma la gestión de sus impuestos municipales de vencimiento periódico; concretamente, en los tributos de cobro por padrón, como son el IBI, el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE), el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) y otras tasas municipales.

Dicha tasa se ha rebajado un 4%, lo que supone una reducción de costes de más de 650.000 euros para los ayuntamientos.

Esta rebaja se suma a la del 40% que ya se aplicó en 2017 sobre la gestión del impuesto de plusvalías y que se mantendrá asimismo en este 2018.

La reducción de los costes se enmarca en la estrategia encomendada por el Presidente de la Diputación, Cesar Sánchez, a la dirección del organismo tributario, de facilitar a los ayuntamientos más servicio y más calidad a un menor coste a partir de la introducción de una serie de medidas de eficiencia, austeridad, innovación y digitalización.

Control del gasto

Dichas medidas han permitido a Suma potenciar el control del gasto con el objetivo de disponer de un mayor margen para rebajar los costes a los ayuntamientos y, al mismo tiempo, aumentar la calidad de los servicios que ofrece tanto a los municipios como a los contribuyentes.

En este sentido, y a falta de la liquidación definitiva del presupuesto de 2017, el organismo ha cumplido con las medidas estatales de contención del gasto, e incluso se ha mantenido cerca de 700.000 euros por debajo de lo que la ley le permite gastar.

El gasto de Suma se ha reducido en un 7% desde 2015, permitiéndole rebajar los costes a los ayuntamientos y potenciar su objetivo de mayor calidad e innovación en todos los servicios que presta y que se traduce en más posibilidades y facilidades para los contribuyentes.

Este planteamiento se mantendrá a lo largo de este 2018. A este respecto, el organismo acaba de aprobar su presupuesto anual, con una reducción respecto al año anterior.

Operación de tesorería

Por otro lado, Suma ha puesto este año a disposición de los ayuntamientos un volumen de financiación de 295 millones de euros a los intereses más bajos de su historia tras suscribir una operación de Tesorería con nueve entidades financieras: Banco Sabadell, Bankia, Caixabank, Santander, BBVA, Cajamar, Banco Popular, Caixa Ontinyent y Caja Rural Central.

Dicha operación permitirá a los ayuntamientos que así lo han solicitado, un total de 127, recibir mensualmente anticipos a cuenta de la recaudación de sus impuestos, que dispondrán de liquidez antes de la finalización de los periodos de recaudación voluntaria y podrán garantizar el pago de sus gastos corrientes a lo largo del año.

Gracias a la gestión económico financiera de Suma y a las negociaciones realizadas con la banca, la operación crediticia se ha cerrado con un tipo de interés medio ponderado del 0,08%, lo que representa un 60% menos que el año anterior y hasta un 71% menos que en 2016, consiguiendo una financiación más ventajosa.