Desde hace unos pocos años es la calle referente de la zona del tardeo alicantino, pero El Suquet ya estaba allí cuando la peatonal Castaños no eran más que cuatro restaurantes. Es evidente que ha sabido adaptarse a los cambios en su entorno, de ejemplo tomamos su cocina ininterrumpida para el disfrute de quién se deje caer cuando plazca, donde el turista que busca lo más representativo de nuestra cocina pueda degustar producto autóctono. Todos los días de la semana, ya que no cierran ninguno, en horario desde las 12:30 que ya están al pie del cañón y con los fogones listos hasta las 23:30 en su terraza terminando con una copa que amenice la sobremesa.
Pero lo que es indiscutible es que sus arroces son un espectáculo para el paladar de los terrestres. En mi visita al restaurante El Suquet me comentó Martín Canto (su Jefe de cocina y mano derecha de Rodolfo de Paz, quien siempre estuvo allí al timón) que este lugar está catalogado como uno de los diez mejores restaurantes para comer arroz de la Comunidad Valenciana.
- VER VIDEO: Restaurante EL SUQUET de Castaños, de Alicante.
El Suquet de Castaños, es un restaurante donde sin pestañear se autodenominan cocina tradicional, la del gusto y el amor por lo fresco, por lo sabroso, donde entre los platos de su carta tanto de corte nacional como con guiños a nuevas tendencias, nos ofrecen sobretodo calidad de producto, muy buen género de mercado y acabado consciente. Su prioridad es mantener el sabor de siempre para no perder su identidad, ganada a pulso con la experiencia culinaria de muchos años.
Platos recomendados de su carta que pude ver elaborar y posteriormente probar, sin duda el Arroz Bomba meloso con Pulpo de roca, untuoso y muy representativo de la calidad de El Suquet, otro plato para degustar su Tataki de Atún de Balfegó (de quien es embajador gastronómico internacional el chef Martín Berasategui) acompañado de pepino, tomate, soja y miel. Es un plato fresco y buen ejemplo donde encuentras calidad del producto.
Por otro lado una típica pericana de la montaña de Muro de Alcoy y como no, uno de los mejores panes del horno antiguo de Benimagrell. Otro de sus guiños gastronómico al producto de mar son las Gambas rojas con salteado de hortalizas al wok, un guiño a Asia con género local y las que pueden ser una de las mejores variedades de Ostras, las Guillardeaü del sur de Francia. Si lo que os gusta es la carne, podemos probar piezas de su vaca gallega, el entrecotte marcado y laminado, en fin, un espectáculo.
Y es que desde el jamón ibérico que te saluda a la entrada, hasta cualquiera de las no pocas referencias de su bodega de vinos, todo es seleccionado pensando en la plena satisfacción del comensal. El que tuvo retuvo y demostrado está, cocina con consciencia.
Como anécdota del lugar, es su archiconocida ubicación, y es que se encuentra situado en un emblemático edificio alicantino del siglo XIX, la antigua juguetería Rico, que es referencia local y lo sabe quién conoce bien la historia de la provincia. Un sitio que guarda un recuerdo entrañable en la memoria de los alicantinos.
El Suquet de Castaños, es un restaurante amplio pero acogedor, con una sala privada para cuarenta personas donde se puede celebrar cualquier reunión o evento, y como no cierran por la tarde, bien se tercia una copa premium en la sobremesa, una terraza en la zona de moda y muy céntrica.
Si quieres disfrutar con los tuyos te lo recomiendo, si te apetece comer sabor de la terreta, también, es más, déjate recomendar por su simpático y profesional equipo de sala que sabe bien lo que hace, un lugar con sabor a tradición, El Suquet de Castaños.
