Ya tienes tu casa pero no sabes ni por dónde empezar a amueblarla, son muchas las cosas a tener en cuenta y no consigues organizarte. A continuación te mostraremos una serie de recomendaciones que te harán esta tarea mucho más fácil.

Lo primero y más importante, determinar un presupuesto. Es básico saber con cuánto dinero contamos, pero no hay por qué alarmarse, la calidad y el precio sí pueden ser buenos amigos. Nunca lo olvides, el buen gusto no está reñido con gastar poco.

Otra cosa a tener en cuenta es que no es necesario amueblar toda la casa de golpe, es mucho mejor ir poco a poco. Primero las cosas más básicas y necesarias, luego iremos añadiendo muebles pequeños y accesorios cuando veamos las necesidades que vamos teniendo, por lo que ir despacio nos evitará problemas futuros.

Construir una casa por el tejado nunca ha sido una buena idea como tampoco lo es comprar muebles sin tener en cuenta el espacio disponible. Por ello debemos de dar importancia a cómo queremos distribuirlos y la proporción que deben tener. Tendremos que tomar medidas de todas las habitaciones dejando espacio siempre a aperturas de puertas y sitios de tránsito habitual. Un buen truco es, con la casa aún vacía, marcar en el suelo con cinta aislante la silueta de los muebles que colocaremos, así nos haremos una idea más exacta del espacio que disponemos.

Otra cosa importante es el espacio que tengamos para almacenar, sobre todo si pensamos a largo plazo, son útiles muebles como armarios, canapés abatibles, cajoneras, zapateros, estanterías, aparadores? además también nos ayudarán a mantener nuestra casa ordenada.

A la hora de empezar a buscar tiendas e investigar las alternativas que nos ofrece el mercado, una buena opción para ahorrar es empezar por visitar tiendas outlet. Puede sorprendernos lo que podemos encontrar en ellas, gran variedad y muchas ofertas.

Por último, para la decoración busca siempre la armonía, no tienes por qué seguir un estilo determinado, pero sí una armonía en cuanto a colores, proporciones de los muebles, tapicerías y textiles, etc. Y por supuesto, siempre aportando tu toque personal.

Finalmente, basta con ver el resultado y quedar satisfecho con él, siempre podremos hacer cambios conforme lo necesitemos a largo plazo. Es momento de disfrutar de tu hogar.