Un 78% de los españoles mayores de 15 años consume alcohol y un 2,2% de los españoles están familiarizados con la cocaína. Como estas, más cifras indican el progresivo aumento del consumo de sustancias perjudiciales y adictivas por igual, pero también es un fenómeno que pasa desapercibido. Un problema que afecta a la sociedad española desde diferentes ángulos, como el económico, sanitario y social.

Alicante se está convirtiendo en una ciudad de referencia para el tratamiento de las adicciones en España con la Clínica Triora, especializada en el tratamiento y rehabilitación de personas que sufren la enfermedad de la adicción al alcohol, drogas o juegos de azar. Con 12 años de presencia en Holanda, el tratamiento de Triora ha logrado que más del 95% de las personas que se han tratado en la Clínica la recomienden. Su éxito radica en la plantilla altamente experimentada con la que cuenta, conformada por un equipo multidisciplinar de psicólogos, terapeutas especializados, enfermeras, psiquiatras, chef, intervencionistas que desarrollan un programa el cual está basado en evidencias.

Muchas personas ven en el alcohol y las drogas la válvula de escape cuando las circunstancias de la vida no son las mejores, pero es un camino que a largo plazo solo tiene consecuencias negativas. El problema de las adicciones es que se desarrollan de manera latente, sin que la persona se dé cuenta hasta que ya es demasiado tarde. Es entonces cuando el ámbito más afectado es el familiar, siendo ellos los principales testigos de cómo día tras día su ser querido va siendo consumido por su adicción, sea del tipo que sea.

Un innovador tratamiendo holístico

Triora ofrece una metodología de desarrollo propio con una orientación holística (cuerpo, mente y valores/principios) y un exitoso enfoque interdisciplinario. Los pacientes son tratados en un entorno confortable donde pueden desconectar con tranquilidad y de forma relajada de sus rutinas habituales de adicción.

El objetivo principal del modelo Triora es desarrollar una mayor autoconciencia y asumir la responsabilidad personal para la recuperación del paciente, que se realiza a través de 5 etapas que suelen durar un mínimo de 28 días, pero con posibilidad de prolongarse:

  1. Entrevista inicial. Es primordial conocer al individuo para saber en qué situación se encuentra, como se siente, y buscar así cuál es la mejor manera de tratar la adicción.
  1. Desintoxicación. Una etapa fundamental para el organismo, tanto a nivel físico como psicológico. Dejar de golpe el consumo de drogas o alcohol puede tener consecuencias para el organismo, por tanto, siempre debe hacerse bajo supervisión médica.
  1. Tratamiento. El tratamiento en la clínica suele durar de cuatro a seis semanas, durante los cuales el paciente vive en unas instalaciones confortables, con un ambiente relajado, en un idioma personalizado y con la ayuda de profesionales expertos para recuperar el control de sus vidas. Para ello, se aborda la adicción de varias formas, pasando por sesiones grupales y tareas individuales, para obtener una visión más profunda de sí mismo y de lo que causa la adicción.
  1. Vuelta a casa. No es necesario que los pacientes queden ingresados en la clínica, puesto que Triora también ofrece tratamiento ambulatorio a domicilio. Además, la clínica ofrece terapia familiar y de pareja, sesiones de mejora de autoestima, sesiones con asesor personalizado y sesiones con un psicólogo o psiquiatra.
  1. Seguimiento. Por último, una vez finalizado el tratamiento, los grupos de autoayuda de Triora ofrecen al paciente el apoyo necesario en cualquier parte del mundo. Este seguimiento se puede desarrollar desde el propio hogar del usuario mediante videollamada por Skype, FaceTime o un sistema seguro propio que ofrece Triora.

Un equipo interdisciplinar

Un amplio abanico de profesionales vela las 24 horas por la persona que se encuentra no solo ingresada en la clínica, sino en la fase de seguimiento. La plantilla que forma Triora está formada por un gran equipo de médicos, psiquiatras, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales y asesores expertos en adicciones, cada uno de ellos con más de 20 años de experiencia en el tratamiento de las adicciones.

Cambiamos la vida de las personas

Una de las mejores maneras de ayudar a las personas es a través de otras que han pasado por lo mismo, que son capaces de ponerse en el lugar del adicto. Testimonios como el de Eduardo: «Agradezco a la gente de la clínica por la forma en que nos ayudan. Y nos conducen por el buen camino (?) Aquello que me podía ayudar, lo que necesitaba para ser más fuerte, estaba frente a mí y me lo enseñaron. Por eso se lo agradezco». O el caso de Tesa: «Estoy muy contenta de haberme reencontrado a mí misma. De ser alguien que vale la pena amar. Porque ya no me siento más sola. Soy alguien. Tengo mi lugar en el mundo y puedo decir: ¡Hey, lo he logrado!». Estos casos pueden ser la guía para reencontrar el camino para muchas personas que lo han perdido.