El candidato a la Alcaldía de Compromís por Orihuela, Cayetano Portugués, y la cabeza de la lista autonómica de Compromís por Alicante a la Generalitat, Mireia Mollà, realizaron ayer una visita al vertedero de Campoamor con el fin de mostrar a dos eurodiputados los olores que emanan de los gases tóxicos de este vertedero y las consecuencias en materia de salud y medioambiental que sufren los vecinos de las viviendas cercanas.

La vicepresidenta del grupo Verdes/ALE en el Parlamento Europeo, Ska Keller, junto a Jordi Sebastià eurodiputado de Compromís-Equo, quien pertenece al mismo grupo parlamentario, conocieron in situ la zona y elevarán estas protestas vecinales a Europa para que se ponga una solución a años de lucha por parte de los residentes para limpiar la zona.

Keller apuntó que «es lamentable el estado en que se encuentra el vertedero abandonado de Orihuela Costa, no sólo por su afección al entorno natural, sino por los perjuicios que está provocando a los vecinos y vecinas de la zona con la emanación de gases que muy probablemente son contaminantes». En la misma línea se manifestó Sebastià, ante «estas montañas de basura que se encuentran a menos de un kilómetro de las viviendas más próximas, por lo que urge una actuación que vamos a pedir a Unión Europea que fuerce».

Se trata de un asunto que Compromís ya ha llevado a les Corts, aunque, tal y como apuntó Mollà «la Conselleria nos indicó que se estaban realizando acciones al respecto, pero la realidad es que la situación sigue sin resolverse. Por su parte, el alcaldable recordó que «incluso están ardiendo los restos acumulados y por tanto supone un riesgo muy serio tanto para el paraje de las Lagunas de lo Monte como para los vecinos».