Ni «sorpasso» ni sorpresas. Las elecciones generales dejan en las principales ciudades de la provincia el mismo panorama que hace apenas seis meses: la victoria del PP. Los municipios de más 20.000 habitantes dieron ayer su respaldo a los populares, que además han ampliado su ventaja en todas las localidades en las que ya se alzaron con el triunfo.
El PP se da un baño de masas en municipios de la Vega Baja como Orihuela y Pilar de la Horada, donde consigue sumar más apoyos que hace seis meses y alcanzar la mayoría absoluta, con el 51,56 y el 51,70 por ciento respectivamente. Otras plazas en las que triunfa son en Benidorm, donde vuelve a crecer en número de votos, y Crevillent, donde gobierna el diputado provincial César Augusto Asencio.
El PSOE, por contra, apenas varías sus resultados respecto a las elecciones generales pasadas y se mantiene como segunda fuerza en las mismas nueve localidades. Eso sí, en la comarca de l'Alacantí continúa sin reaccionar y en los cuatro municipios de más de 20.0000 habitantes, San Vicente del Raspeig, El Campello, Mutxamel y Sant Joan d'Alacant, sigue en tercera posición por detrás de un PP que sube en todas las plazas y de A la Valenciana. Una cuestión que no es baladí en San Vicente y Sant Joan, donde los alcaldes son socialistas, aunque gobiernan en coalición.
Además, en El Campello Ciudadanos les pisa los talones con un 17,37 por ciento de los votos por el 18,26% del partido del puño y la rosa.
En Xàbia, donde José Chulvi arrasó en las elecciones municipales de hace un año, los socialistas vuelven a ser la tercera fuerza política, por detrás de los populares, que han incrementado la diferencia en cuatro puntos, y de A la Valenciana.
En La Nucía el PP ha reaccionado tras las duras cifras de diciembre, cuando sufrió un batacazo monumental, y ha pasado del 32 al 36 por ciento. Ha sido en este pueblo donde Ciudadanos ha conseguido sus mejores resultados, con un 20,43 por ciento, que le sirve para sostener el tercer puesto, por delante de unos socialistas que aumentan ligeramente el número de votos pero no lo suficiente como para abandonar la cuarta posición.
Por su parte, A la Valenciana no solo no ha conseguido «enganchar» al electorado sino que además pierde apoyos en varias plazas. La más significativa es Dénia, donde en diciembre fueron primera fuerza a costa del PP. El partido de la gaviota ha dado la vuelta a los resultados al pasar de 25,82 al 30,42 por ciento y desbancar a la coalición de izquierdas, que como consuelo se queda en la segunda posición por delante del PSOE.
Compromís-Podemos-EU solo mantiene su hegemonía en Alcoy, única localidad de las grandes de la provincia en la que ha conseguido imponerse y, además, ha logrado más votos que en diciembre. Como contrapartida, la confluencia de izquierdas sigue siendo la cuarta fuerza política en Pilar de la Horadada, una de las pocas en las que Ciudadanos no baja del «podio».
En l'Alfàs del Pi, el PP también gana y la coalición de izquierdas no ha calado, ya que ha perdido dos puntos respecto a las elecciones de diciembre, mientras que el PSOE prácticamente consigue los mismo apoyos y se mantiene en segunda posición.
Altea es otra de la localidades que no ha «digerido» bien A la Valenciana, ya que igualmenteobtiene menos votos, en tanto que los socialistas registran un inapreciable ascenso y el PP también suma más apoyos.
En Calp, donde gobierna el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, los populares no solo han logrado frenar la sangría de diciembre, sino que pasan del 29,15 al 33,18 por ciento de apoyos.
En Novelda, se estrecha un poco más la diferencia entre el PSOE y A la Valenciana, con solo 18 votos de diferencia entre uno y otro (3.279 por 3.261); eso sí, muy alejados ambos de los 5.000 que roza el PP.
